Enric Morera ficha para Presidencia de Les Corts al exdiputado más próximo a Mónica Oltra

El exdiputado de Compromís Paco García, una de las personas de la máxima confianza de Mónica Oltra en el seno de la coalición, formará parte del equipo de la Presidencia de Les Corts durante la próxima legislatura. La jefatura de la Cámara la ocupa de nuevo Enric Morera después de una fuerte resistencia interna generada desde el Bloc. Ese rechazo fue vencido, precisamente, la semana pasada, cuando Oltra dio un golpe de autoridad y zanjó el debate apuntándose a las tesis del socialista Ximo Puig para que Morera continúe presidiendo el Parlamento valenciano. García, que se quedó al borde de la reelección como diputado, encuentra un espacio en el gabinete que preside la Cámara, según señalaron fuentes de Les Corts. El exdiputado ocupaba el puesto número diez de la lista de Compromís por Valencia, donde la coalición logró nueve escaños.

Paco García no es cualquiera en Compromís ni en el círculo político de confianza de Oltra. Cuando la líder de la coalición se escindió de Esquerra Unida, una de las personas que la acompañó, y que participó en el puerta a puerta con el fin de convencer a una parte de la militancia de EU a participar en el proyecto que ahora es Iniciativa del Poble Valencià fue Paco García. Oltra se siente cómoda entre sus leales. A García rara vez se le ha escuchado en los pasillos de Les Corts deslizar un comentario que suponga una crítica a la coalición, y mucho menos al Consell. Rara vez, por no decir nunca.

El exdiputado es portavoz de IPV junto a Mireia Mollà y Miquel Real, tiene un estrecha relación tanto con la propia Oltra como con Pasqual Mollà, ideólogo de la formación, desde hace varias décadas. Los resultados de las elecciones le dejaron a un paso de entrar en Les Corts, pero a la espera de que se produzcan movimientos en el grupo, su inclusión en Presidencia de la Cámara garantiza a Oltra tener unos ojos de confianza en el seguimiento de la tramitación de las leyes del Botánico, que durante la pasada legislatura se atascaron en muchas ocasiones por la falta de una vigilancia de esos procesos burocráticos que en ocasiones son demasiado prolongados. A nivel municipal, García participó en el enfrentamiento con el PSPV que llevó a romper el gobierno municipal de Llíria, una ruptura que posteriormente se recondujo. El dirigente edetano del partido de Oltra se encargaría de que los procedimientos parlamentarios no solapen los intereses políticos del tripartito.

A lo largo de la pasada legislatura, son numerosos los ejemplos de proyectos legislativos que, sin saberse exactamente por qué, se han empantanado en despachos o comisiones de Les Corts. En ocasiones, sin embargo, sí se sabía el motivo. Desde la oposición se reclamaba ampliar los plazos para la tramitación de enmiendas, sin que el tripartito coordinase previamente una respuesta negativa si había interés en acortar los plazos para sacar adelante una ley. Nadie tampoco se tomaba demasiado interés en cuestionarse las peticiones de ampliación de plazos para presentar enmiendas desde los propios grupos que sostenían al Consell, que en ocasiones parecían no tener demasiada prisa en que los proyectos de ley del Gobierno cristalizasen. A la Ley de la Infancia se presentaron más de 500 enmiendas, mientras que Compromís realizó más de 200 precisiones a la Ley de Mediación presentada por el departamento de Gabriela Bravo.