La nueva fiscal Anticorrupción busca ahora un puesto en Europa

Adoración Cano fue la única fiscal que solicitó la plaza vacante que quedaba en Anticorrupción tras la marcha de Jesús Carrasco, el primer delegado de la sección en la Comunitat Valenciana.

No hubo más problemas, pues, a la hora de atribuir esa responsabilidad. Pero hace tan sólo unas semanas y de manera sorprendente se conocía que Cano también albergaba otros intereses profesionales. Así, según publicó 'El confidencial digital', Cano se ha presentado a una de las siete plazas para ser fiscales europeos delegados.

El objetivo es la creación de una especie de Fiscalía Europea centrada exclusivamente, al menos en esta etapa, en delincuencia económica. Serían los fiscales los que llevarían directamente la instrucción. Cano figura entre las preseleccionadas y, al parecer, es una de las favoritas. Uno de los requisitos es el dominio de al menos dos idiomas. En total, se han presentado cerca de una veintena de aspirantes. La fiscal valenciana pertenece a la Unión Progresista de Fiscales (UPF). De hecho, forma parte del Secretariado, el órgano de Gobierno de la entidad.

Se trata de la misma asociación de la que formaba parte la actual fiscal general del Estado, Dolores Delgado. La exministra se ha encargado en los últimos tiempos de impulsar ascensos o nuevas responsabilidades de personas afines a la UPF. La marcha de Cano dejaría nuevamente el problema de quién asume la vacante en la Fiscalía Anticorrupción de Valencia, donde no hubo más aspirantes que ella. Cano ya intentó en su momento, durante la última renovación de la Fiscalía de Valencia, presentarse a la plaza de fiscal jefe. No salió elegida.

En el plano profesional, Dora Cano se encargó de la instrucción –la segunda investigación tras el archivo inicial– del accidente de metro de Valencia en el que murieron 43 personas. Finalmente, el caso se cerró con la condena a penas mínimas para cuatro responsables del siniestro y la retirada de la acusación para el resto.