Estreno, en Madrid, de la película Las cartas perdidas, con dos altos cargos del Consell lp

El PPCV pone la vista en «la vida padre» de la consellera de Transparencia, pagada con dinero público

Los populares piden la documentación de la noche de cine y palomitas por 1.380 euros en Madrid de Pérez Garijo

M. Hortelano

Valencia

Domingo, 19 de febrero 2023, 13:32

La noche de cine y palomitas para dos, en Madrid, por 1.380 euros, que la consellera de Transparencia, Rosa Pérez Garijo, ha cargado al erario público tendrá secuela. El portavoz de Transparencia del grupo popular en Les Corts, Fernando Pastor ha acusado a ... la titular de este área en el Consell de «darse una vida de lujo a costa del dinero de los valencianos» tras conocerse que gastó más de mil euros para ir al cine una noche en Madrid acompañada de un alto cargo de su Conselleria.

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Pastor ha denunciado que la Consellera acudió a Madrid en el mes de octubre acompañada del director general de Calidad Democrática, Ignacio Pérez Rico, para el estreno de una película sobre el exilio de mujeres republicanas que subvencionó con 18.000 euros de dinero público y que apenas han visto 4.000 espectadores, como ya contó este diario. «Sería más apropiado cambiarle el título a la película: 'La gran vida' en lugar de 'Las cartas perdidas'».

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«Garijo apura sus últimos días en el Consell pegándose la vida padre con el dinero público en lugar de cumplir con sus funciones como responsable de transparencia y buen gobierno e investigar la trama del hermano de Puig, diseñada para ordeñar dinero público, o la supuesta financiación irregular del PSPV de Puig, ha señalado». Los populares han presentado en Les Corts una pregunta escrita al Consell preguntando por los gastos de representación de la consellera en los últimos meses y, en concreto, en el reciente viaje a Uruguay, Chile y Argentina de hace un mes.

Fernando Pastor ha señalado que los valencianos «no tenemos motivos para soportar el elevado tren de vida de esta consellera, sus lujos y viajes, que no gestiona, solo se dedica a gastar dinero público en subvenciones a sus amigos y en caprichos sectarios al servicio de su ideología. Esos recursos podrían destinarse, por ejemplo, a solucionar el caos en la sanidad pública y evitar el colapso de las urgencias».

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