Podemos se olvida de su ley de vaciado de las diputaciones

Los socialistas, una vez cogieron el testigo del PP al frente de las corporaciones provinciales, cayeron en la cuenta de su utilidad. Compromís, a pesar de su escepticismo, ha participado en el gobierno de la Diputación de Valencia y allí sigue. Poco se sabe de su ley de comarcalización, tan aparcada como la podemista sobre las diputaciones. Fuentes de Podemos admiten que la propuesta lleva «más de un año» sin ser mencionada en las reuniones del grupo parlamentario, lo que constituye un alivio para el PSPV, que en su día se resistió a darle cancha, especialemente después de que Puig adelantase las elecciones en 2019 y las iniciativas decayeran.

Podemos, al inicio de la presente legislatura, aseguró que tenía intención de retomar un poryecto por el cual la Generalitat captaría numerosas de las competencias que actualmente están en manos provinciales, ha perdido entusiasmo por una proposición que pretendía convertirse en punta de lanza de la acción política del partido en la Comunitat. Pasadas las elecciones, y una vez se integraron en el Consell, ese afán legislativo se apaciguó. En 2020 hubo algún amago de recuperar un texto que se llevó a Les Corts en septiembre de 2018, tras el caso Alquería, un terremoto que provocó la caída de Jorge Rodríguez de la presidencia de la Diputación de Valencia.

En enero de 2021, Pilar Lima desbancó a Naiara Davó al frente del grupo parlamentario. A partir de entonces, aquellas iniciativas de podemos se ubicaron en punto muerto, aparcadas de manera casi definitiva. La nueva dirección podemista impulsa ahora otra ley, la de salud mental, que cuenta también con muy poco predicamento entre sus socios del tripartito, lo que amenaza con depararle el mismo destino que a la del vaciado de las diputaciones.