El PPCV explora la senda de los congresos de unidad

Las batallas internas que ha vivido el PP valenciano a lo largo de su historia, a veces a nivel regional y otras circunscritas a una provincia, parecen haber dejado paso a una nueva etapa, la de la unidad. La formación que preside Isabel Bonig celebra en las próximas semanas tres congresos, el de la ciudad de Valencia y los provinciales de Valencia y Alicante. Y en cada uno de ellos concurrirá un único aspirante al liderazgo del partido.

En el primer caso, María José Catalá ya ha sido proclamada única aspirante a la presidencia del partido en la capital. En Alicante, el plazo para presentar candidatos acaba hoy a las 14.00 horas, y el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, será el único candidato a la presidencia provincial. En el caso de la provincia de Valencia, el plazo finaliza a las 20.00 horas y todo apunta a que Vicent Mompó no tendrá alternativa en la carrera por el liderazgo orgánico.

En la ciudad de Valencia, la designación de Catalá pondrá fin a la interinidad en la que se encontraba el partido desde principios de 2016, cuando la cúpula de la formación fue detenida en el marco de la Operación Taula. La portavoz de los populares será unida el próximo 10 de julio como líder en la capital, con el único objetivo de hacerse con la alcaldía en las próximas elecciones municipales.

En el caso de los congresos provinciales, el PP valenciano explora una senda, la del congreso de unidad, a la que hacía años que había dado la espalda. En Valencia, la bronca entre Vicente Betoret y Mª Carmen Contelles en 2017 derivó en la creación de una gestora impuesta por Génova, ante la imposibilidad de que el cónclave se celebrara con unos niveles mínimos de entendimiento. Una dirección provisional que se ha prolongado durante tres años, el mismo tiempo en el que se ha mantenido la confrontación en una provincia clave en cualquier cita electoral. La intervención del secretario general del PP, Teo García Egea, ha resultado clave para aunar posturas sobre la candidatura del diputado provincial y alcalde de Gavarda. García Egea logra que sólo haya un candidato en los congresos provinciales de Valencia y Alicante y en el local del cap i casal.

En la provincia de Alicante, el papel de la calle Génova también ha sido determinante. La apuesta por Mazón, con su incorporación en la lista del PP de Alicante en las últimas municipales, ya deslizó la intención de la dirección nacional por situar al joven dirigente alicantino al frente de una nave que durante años ha vivido condicionada por una pugna con el zaplanismo bajo todos los focos. Con Mompó y Mazón, la dirección nacional se asegura barones provinciales con amplio respaldo y además con una indiscutible lealtad hacia la dirección nacional. Un éxito que no pudieron alcanzar en su día ni Dolores de Cospedal ni Fernando Martínez Maillo como coordinador general.

La apuesta por los congresos sin confrontación puede contribuir a que el debate orgánico en el PP no entorpezca la labor de control y presión al Consell del Botánico. Un objetivo al que, no obstante, también debería contribuir el congreso regional, a celebrar previsiblemente en 2021 y para el que Bonig ya ha mostrado su intención de volver a presentarse.