PSPV y Compromís se enredan con la renovación en la Sindicatura de Comptes

Pero el caso de la Sindicatura de Comptes, el órgano encargado de fiscalizar las cuentas de la mayoría de las administraciones públicas valencianas, es algo más peculiar. El próximo lunes día 20 finaliza formalmente el mandato de Cucarella, igual que de los dos Síndics, Marcela Miró y Antonio Mira Perceval. Estos últimos no pueden continuar en el cargo después de sucesivas renovaciones que les han llevado a ocupar durante 18 años estas responsabilidades.

Cucarella, propuesto en su día por Compromís, podría continuar, pero únicamente en uno de los puestos que dejan Miró y Mira Perceval. De hecho, las fuentes parlamentarias consultadas por este diario aseguran que el aún Sindic Major habría mostrado su disposición a aceptar ese cargo.

Pero claro, si Cucarella sigue, el puesto de Síndic Major dejaría de ser propuesto por Compromís. La formación nacionalista llegó a solicitar formalmente a los servicios jurídicos de Les Corts hace unas semanas un informe respecto a las posibilidades de que Cucarella continuará en su mismo puesto. La respuesta de los letrados de la Cámara fue tajante: no hay ninguna opción. Las fuentes consultadas por este diario aseguran que desde Compromís se llegó incluso a deslizar al PSPV la posibilidad de que Cucarella fuera la propuesta de los socialistas, opción que la formación que lidera Ximo Puig descartó de inmediato.

¿Y entonces qué? Desde el próximo lunes Cucarella, Mira Perceval y Miró pasan a estar en situación de interinidad, una suerte de prórroga de su mandato mientras el Parlamento valenciano no se ponga de acuerdo para nombrar nuevos responsables. La renovación de la Sindicatura de Comptes requiere de una mayoría parlamentaria cualificada de tres quintos de los diputados -60 escaños-. Una cifra que obliga a que el tripartito reciba el apoyo de varios de los diputados de la oposición.

Sin acuerdo entre PSPV y Compromís respecto a quien puede asumir la nueva responsabilidad, entre otras razones porque los nacionalistas no quieren renunciar a ser quien proponga al nuevo Síndic Major, y con un escenario político en el que las causas judiciales, el desgaste del Gobierno central y la inflación amenazan la hegemonía electoral de la izquierda, uno de los escenarios que se contempla es el de que esa renovación se aplace de forma indefinida.

Si ese es el camino escogido, Cucarella, Miró -propuesta en su día por el PPCV- y Mira Perceval -elegido a propuesta de los socialistas- se mantendrían en sus cargos hasta que el Parlamento valenciano no resolviera la elección de sus sustitutos. Una situación que podría prolongarse incluso durante el resto de legislatura.

La designación del Sindic Major de Comptes no es, ni mucho menos, la de un órgano estatutario cualquiera. Como recoge la institución en su página web, la Sindicatura «se encarga principalmente de fiscalitzar las cuentas de la Generalitat Valenciana, de los organismos que dependen de ella y de las corporaciones locales valencianas. Este es un trabajo necesario para el control del dinero público -que es dinero de todos los valencianos- y por eso no solo tenemos que procurar que las cuentas respeten los principips conables y cumplan las leyes vigentes, sinó también seguir avanzando para que la gestión de los recursos humanos, materiales y presupuestarios se realitce cada vez de manera más económica, eficaz y eficiente».