Puig insiste en que el Tajo-Segura «no se toca» y defiende negociar frente a «guerras del agua»

valencia. El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, insistió ayer en que el trasvase Tajo-Segura «no se toca» porque es «irrenunciable» y defendió la «negociación» frente a las «guerras del agua» porque crean «mucho barro y no generan ni una gota más». Del mismo modo, respaldó la necesidad de conseguir «agua para siempre y a un precio razonable» puesto que «constituye un factor clave en nuestro progreso y desarrollo, especialmente en la Vega Baja».

Así se ha pronunciado en Orihuela durante su intervención en el coloquio 'Converses de Futur', organizado por el Club Diario Información, donde subrayó que el Consell tiene la «mano tendida» al Ministerio de Transición Ecológica y que las negociaciones continúan «abiertas» y de «de la mano de los regantes», sin «guerras del agua».

«La vía es la negociación y el acuerdo a través del diálogo con el Ministerio junto a los regantes, porque las guerras del agua generan mucho barro y no generan ni una gota más de agua», recalcó.Puig insistió en que «el trasvase no se toca», pero al mismo tiempo consideró fundamental sumar todos los recursos disponibles a través de la reutilización o la desalación «para garantizar el agua por justicia, sensatez y pragmatismo».

En este sentido, anunció que el nuevo Plan de Gestión de Riesgos de Inundaciones de la Confederación Hidrográfica del Segura para el periodo 2022-2027 contemplará inversiones «históricas» para la Vega Baja. En concreto, avanzó que el Consejo de Ministros aprobará once actuaciones por valor de 343 millones, lo que supone un aumento del 1.500 por ciento en la inversión respecto al periodo 2016-2021, en el que se ejecutaron actuaciones por 1,7 millones.

Por otra parte, Puig detalló que ha reclamado a la Confederación Hidrográfica del Segura una actuación «inmediata, urgente y prioritaria» en el río.