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El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, visitó a principios de esta semana la localidad de Aspe. Allí se concretó el pasado martes la firma del convenio que regulará durante la próxima década el trasvase Júcar-Vinalopó, un acuerdo recibido con entusiasmo por los más de 20.000 agricultores que se podrán beneficiar del citado aporte hídrico. Junto a Morán, como no podía ser de otra manera, la delegada del Gobierno en la Comunitat, Pilar Bernabé.
Bernabé también participó un día antes en un acto convocado por el PSPV en la misma localidad alicantina. Ximo Puig, secretario general del PSPV, compartió tribuna con Morán, con el líder provincial de los socialistas de Alicante, Alejandro Soler. Y, por supuesto, con Pilar Bernabé.
La intervención de Soler en ese acto, en contraposición con el silencio de Carlos Fernández Bielsa en el que tuvo lugar el 8 de octubre en Quart, puso el foco en la relación de Puig con los líderes provinciales del PSPV, precisamente los que provocaron que Ferraz le cambiara al ya expresident del Consell su propuesta de candidatura para las elecciones generales.
Pero lo cierto es que la presencia de Bernabé, aupada a la vicesecretaría general del PSPV el pasado mes de julio, y que tomó la palabra en ese acto de partido, es la que ha disparado las especulaciones respecto a su futuro más inmediato en el partido.
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Bernabé fue concejal socialista en el Ayuntamiento de Valencia, al frente del área de Empleo, Envejecimiento activo y Deportes, hasta que en junio de 2022 fue nombrada por el Ejecutivo nueva delegada del Gobierno en la Comunitat. Su designación, la visibilidad que le daba el cargo, disparó los análisis que de inmediato la situaron como posible cartel electoral socialista para el Ayuntamiento de Valencia –no pensando en la cita de 2023, que le habría obligado a dejar el cargo y a nombrar un nuevo sustituto-.
El resultado del 28-M con la masiva pérdida de poder e influencia por parte del PSPV resitúa la situación del partido. Perdida la Generalitat, la Diputación de Valencia y el gobierno del consistorio valenciano, el PSPV afronta la renovación de liderazgos como la próxima parada para tratar de arrancar la remontada de cara a las municipales y autonómicas de 2027. El congreso de los socialistas valencianos no llegará hasta que se haya celebrado el federal. Y éste, previsiblemente, esperará hasta otoño de 2024.
Pero los movimientos orgánicos, como las campañas electorales, no se detienen nunca. Bielsa sería el gran favorito para tomar las riendas del PSPV si hubiera conquistado la presidencia de la Diputación. No lo hizo, y esa circunstancia no le arrebata sus opciones, pero sí que le deja en condiciones similares a las del resto de hipotéticos aspirantes. El propio Alejandro Soler es otro de los nombres a tener en cuenta en el futuro del socialismo valenciano.
¿Y Puig? La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, y la síndica de los socialistas en Les Corts, Rebeca Torró, están consideradas, junto con Arcadi España, como las opciones más cercanas a Puig para optar a la secretaría general del PSPV. A esos nombres es a los que las fuentes socialistas consultadas por este diario incorporan a Bernabé.
Su propia consolidación en la estructura del partido como número dos de Puig, la solvencia con la que viene desempeñando su labor en la delegación del Gobierno, y el hecho de ser uno de los rostros más amables de la primera fila del socialismo valenciano le convierten en una opción seria para ocupar nuevas responsabilidades. Puig además no oculta su buena sintonía con Bernabé, de quien dijo tras situarla como vicesecretaria general que de esta forma «impulsaría la acción política del partido».
Bernabé, que en ningún momento ha cometido el error de situarse como opción en la cerrar orgánica del partido, viene cumpliendo el papel de correa de transmisión de la acción del Gobierno de Sánchez en la Comunitat. Un papel que en el caso de la Comunitat Valenciana no resulta sencillo a la vista del retraso en la ejecución de la agenda valenciana. Dispone por tanto de buena conexión con el Ejecutivo central, circunstancia que constituye un factor adicional a tener en cuenta de cara a considerar un papel protagonista en el futuro del socialismo valenciano.
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Doménico Chiappe | Madrid
Javier Bienzobas (Gráficos) y Bruno Parcero
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