À Punt vuelve a primar la experiencia en Canal 9 para elegir hombre del tiempo

Hace exactamente cuatro años, tal día como hoy, Les Corts dio luz verde a la puesta en marcha de la nueva radiotelevisión valenciana, con la aprobación de su ley de creación y la recuperación del servicio público, hasta entonces suspendido tras el cierre de la extinta Radiotelevisión Valenciana (RTVV). Sin embargo, cuatro años después de su puesta en marcha y algo más de dos desde las primeras emisiones, la entidad pública sigue instalada en la provisionalidad en lo que a plantilla se refiere. Y es que la Corporación Valenciana de Medios (CVMC), heredera de RTVV sigue echando mano de la creación de bolsas de empleo temporales para ir conformando su plantilla. 

La última en constituirse, el pasado viernes, fue la de provisión de puestos de meteorólogo en la televisión pública valenciana, que se había agotado, tras el fichaje de uno de los responsables del tiempo de la cadena por TVE. En total, 13 personas que formarán parte de la bolsa de la que À Punt podrá ir seleccionando responsables de la información climatológica según los vaya necesitando. Aunque, el primero de los puestos, obtenido por quien fue el hombre del tiempo de Canal 9, ha obtenido el triple de puntuación que quien lo sucede. En concreto, el primer clasificado en la baremación cuenta con 37,10 puntos, mientras que segunda y tercero se han quedado en 11,31 y 11,20 puntos. La diferencia de puntos es significativa, ya que el primero en bolsa triplica al resto de aspirantes. El motivo no es otro que haber pertenecido a la antigua RTVV. Y es que la dirección de la Corporación ha vuelto a utilizar el baremo que se aprobó en 2017. En él, un extrabajador o trabajadora de la extinta Canal 9 o Radio 9 podía contar con hasta 26,5 puntos de los 50 posibles. De hecho, sólo por haber obtenido plaza mediante proceso selectivo, ya da 7,5 puntos a los exempleados, mientras que un máximo de 19 se pueden conseguir con los meses de experiencia en la anterior tele o radio públicas.

La baremación que en su día se articuló para dar forma a las bolsas temporales que permitieron poner en marcha el servicio público siguen tan vigentes como el primer día, a pesar de que la propia ley de la tele ya fijaba un máximo de tres años desde su aprobación, en 2016, para convocar un proceso de oposición que permitiera cubrir la plantilla definitiva de la entidad. Con las bolsas provisionales, en su día, casi el 90% de los empleados y empleadas que entraron en la radio o la tele habían trabajado ya en RTVV. De hecho, la experiencia en la anterior empresa pública se mantendrá también de cara a conformar la estructura definitiva, ya que en las bases que la Corporación publicó hace casi un año ya se dejaba ver una ventaja para quienes ya hubieran formado parte d À Punt, de manera provisional, a la hora de conseguir una plaza en el concurso de méritos.

Costa presume de audiencia

El director general de À Punt, Alfred Costa, explicó ayer el nuevo modelo de la televisión autonómica con el que pretende abrir las puertas «a toda la sociedad valenciana para que se sienta representada» en la cadena. Durante un encuentro con el Club de marketing del Mediterráneo, aseguró que los canales que conforman esta empresa pública están al servicio de todos los sectores productivos de la Comunitat para promocionar toda la actividad económica y empresarial y defendió la «gran capacidad que tiene actualmente el ente público para impactar al conjunto de la sociedad valenciana, donde diariamente llega a más de medio millón de personas», según dijo.