Los querellantes contra Mazón por la dana, de un «Quijote jurídico» a un gurú de cursos para triunfar

José Luis Mazón comparte apellido con el presidente de la Generalitat a quien ha denunciado. Mazón contra Mazón. Se define como un «don Quijote» de la Justicia -en este caso parece que sin escudero-, un litigador de causas perdidas que sostiene que ha sido un gran error la decisión del TSJ de no abrir causa penal. Habla de un pacto «mefistofélico» entre PP y PSPV, una cortesía de «canalleros», un cambio de cromos entre los dos grandes partidos para evitar la imputación de Mazón. No acierta a explicar, sin embargo, qué gana el PP en esa jugada.

En alguno de sus escritos que tenía previsto presentar al TSJ recoge la expresión «marear la perdiz» por parte del fiscal del caso, conceptos algo alejados de lo jurídico. Ejerce desde un despacho de Madrid, aunque los asuntos, de cualquier jurisdicción, le llevan por toda España. En su web, recuerda un reportaje de la revista Tiempo y cómo le calificaron entonces como «el abogado de lo imposible». Le agrada la definición. «La autoalabanza envilece, pero es tan dulce», admite sin rubor. «No hay caso imposible si existe una estrategia brillante». Trabaja solo, por cierto. También mantiene un apartado para sus casos más famosos, «los que han salido en prensa», donde cita la primera condena por contaminación electromagnética. «A mi la publicidad me sobra y esto -en referencia a Mazón- me cuesta dinero», zanja.

Raúl Castañeda parece otro de los que han visto en este procedimiento una oportunidad al lucimiento. LAS PROVINCIAS ha tratado de contactar con él para que relatara las motivaciones que le llevan a denunciar al presidente de la Generalitat. Adelantó que atendería a este medio el pasado martes, pero no cumplió su compromiso. Su despacho Preico Jurídicos tampoco destaca por una atención ágil al usuario. Una cordial centralita electrónica da la bienvenida y, al cabo de unos minutos y también por el mismo precio, la despedida.

Castañeda presume de que ha ganado el cien por cien de los casos. Tal porcentaje de éxito le ha llevado a recuperar más de 120 millones de euros. «La revolución contra las injusticias», parece su eslogan. La actividad del letrado, un especialista en la lucha contra la usura, según se define, abarca también una labor de asesoramiento y/o coaching. En esta destreza, ofrece diferentes cursos y mentorías. En uno de ellos, quizá el menos ambicioso, concede al cliente la oportunidad de ser recogido en un Bentley, recorrer el despacho de abogados y, posteriormente, ir con Castañeda en un Ferrari SF90 a un restaurante de lujo donde supuestamente te será asesorado acerca de algún negocio o propuesta. La experiencia se titula «5 horas con Raúl».

El letrado también ha publicado un libro que vende por 20 euros donde manifiesta no tener miedo a arruinarse (sería la segunda vez) porque dispone de la fórmula para volver a hacerse rico. «Navega por mi mente, conoce las piedras con las que he tropezado...». Tras esto, ofrece otras cuatro experiencias –una de ellas es la de '5 horas con Raúl'– para alcanzar un momento vital de éxito, el máximo desarrollo personal.

Youssef Bozrouti, por su parte, es otro de los letrados que dirigía una de las querellas que se presentaron contra el dirigente del Palau. Trabaja en un despacho de Parla y representaba a una asociación de Valencia –no precisa cuál– que reclamaba responsabilidades.

Pero ahora tras la decisión del TSJ –inadmite las denuncias y apunta a un juzgado unipersonal– confirma que ya no seguirá adelante en este procedimiento. El profesional ganó un concurso de la universidad acerca de explicar una tesis doctoral en tres minutos. Su estudio consiste en un trabajo sobre el blanqueo de capitales.