Lo Rat Penat no espera más a la Diputación. Ya se ha cansado y ha buscado una alternativa. Prácticamente cuatro meses después de que presentara ante el presidente de la corporación provincial alegaciones en contra de que se le denegase el Teatro Principal para celebrar sus centenarios Jocs Florals, la entidad cultural más antigua de la Comunitat Valenciana ha decidido llevar el próximo 7 de mayo la 134 edición de este certamen poético en lengua valenciana al Teatro Olympia de la capital valenciana.
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La decisión de trasladar a mayo este certamen centenario, el más importante y antiguo que se celebra en la Comunitat Valenciana, ya la avanzó hace poco más de un mes el presidente de la entidad, Enric Esteve, aunque esperaba que el acto se pudiera desarrollar, como ha sido tradicional, en el Teatro Principal y todavía les queda una remota esperanza.
Los tradicionales Jocs Florals son un certamen de poesía en lengua valenciana, el único que se celebra a lo largo de la Comunitat, en la que los poetas cantan a la regina de ese año, en este caso, Mónica Duart.
Pero en vista de que la diputada de EU, Rosa Pérez Garijo, la responsable de teatros de la institución provincial, ya negó el Principal a Lo Rat Penat el pasado mes de agosto, y después de que hayan transcurrido cuatro meses desde que se recurriese esa decisión ante el presidente de la Diputación, Jorge Rodríguez, a día de hoy el máximo responsable de Lo Rat Penat, Enric Esteve, todavía no ha recibido una contestación oficial al respecto. De ahí que el órgano de gobierno de la institución cultural haya decidido llevarse sus Jocs Florals a otra ubicación, en este caso a un prestigioso teatro valenciano, «gracias a la colaboración de la familia Fayos».
Será esta la primera ocasión, si no se remedia, en la que Lo Rat Penat lleve sus tradicionales Jocs Florals fuera del Teatro Principal, al margen de celebraciones o acontecimientos extraordinarios, como fue, por ejemplo, la celebración del centenario, los episodios de la Guerra Civil española, o la celebración de la Exposición Regional Valenciana de 1909.
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Hace prácticamente cuatro meses, el pasado 24 de noviembre, el presidente de Lo Rat Penat presentó un escrito de reposición ante el presidente de la Diputación, Jorge Rodríguez, en contra de la decisión de la diputada delegada de teatros, Pérez Garijo, que negó a Lo Rat Penat la cesión del Principal, a pesar de que se ha convertido ya en una tradición de más de 100 años de historia celebrar sus Jocs Florals en ese teatro de titularidad de la Diputación de Valencia.
En un principio el entorno del presidente de la corporación provincial deslizó que la solución a este conflicto iba a ser rápida e incluso favorable a Lo Rat y contraria a la posición mantenida por la representante provincial de EU, que modificó la ordenanza. Sólamente había que presentar un recurso de reposición y esperar a que la Secretaría general de la institución provincial emitiese un dictamen al respecto.
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Pero desde que se presentó el recurso han transcurrido prácticamente cuatro meses y el área de Presidencia de la Diputación guarda silencio semana tras semana. Incluso en una sesión plenaria que se celebro de forma extraordinaria aquel mes de noviembre a instancias del PP y de Ciudadanos, la portavoz popular, Mari Carmen Contelles, deslizó la posibilidad de que se hubiese podido incurrir en un caso de prevaricación.
Lo Rat Penat realizó la solicitud de reserva del Principal el 28 de abril del año pasado. Pero la diputada de EU no contestó de forma inmediata. Cambió la ordenanza del teatro, se aprobó en sesión plenaria y se hizo público en el Boletín Oficial de la Provincia de Valencia el 28 de agosto. Un día después se denegó la solicitud, de acuerdo con la nueva ordenanza, pese a que se aprobó después de realizar la solicitud de cesión del teatro y del trono que habitualmente se ha utilizado.
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Lo Rat, después de la celebración de aquel pleno extraordinario de noviembre, y tras indicaciones del área de Presidencia, reclamó la anulabilidad de la resolución de la representante de EU por haber aplicado en su resolución una norma posterior a una acción anterior y haber creado de ese modo inseguridad jurídica.
La amenaza de la presentación de una demanda por presunta prevaricación contra la diputada de EU por no ceder el Principal, y la posibilidad de que se extendiera hacia la presidencia, pareció animar en su momento a Rodríguez a resolver la situación. Sin la continuidad en el cargo asegurada en el próximo mandato, temía dar un motivo más a su partido para apartarlo. Pero la vía judicial se enfrió y el presidente también ha frenado la solución.
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