«La relación con el Rey Juan Carlos era de máxima confianza»

valencia. En un pasaje de 'El jefe de los espías', sus autores revelan cómo el Rey emérito se sincera con Emilio Alonso Manglano y le confiesa su soledad. Lo solo que se está en la cumbre. ¿Era el mismo caso del jefe del espionaje? Juan Fernández Miranda y Javier Chicote aceptan que comparten «esa sensación, pero lo cierto es que en sus notas era extraordinariamente parco en lo que a sus sentimientos se refiere, por lo que no lo podemos asegurar». «De lo que no hay duda es de que tras su dimisión se sintió solo, no en lo familiar, pero sí en lo profesional», añaden ambos periodistas, que acometen con su obra un proceso singular en la investigación periodística española: desvelar la memoria de un protagonista estelar de la Historia reciente a partir de la generosa donación de sus papeles, un modélico gesto de los descendientes del militar de enorme valor.

«Manglano», advierten, «fue el primer escritor de este libro, porque la base documental que legó a sus hijos, y ellos nos pidieron reconstruir periodísticamente, fue inmensa, y en ella destacan sus notas manuscritas. Este libro es su vida, y a veces duele, pero seguro que disfrutaría corroborando que la suya fue una vida singular». Y concluyen: «Su relación con el Rey era de máxima confianza, hasta el punto de que le confesaba cuestiones de su vida familiar y privada. Don Juan Carlos confiaba enormemente en Manglano y se apoyó en él. De alguna manera el Cesid trabajaba para el Rey, como jefe del Estado. Es una de las cuestiones que se derivan de que España en los 80 fuera un país en construcción».