El Síndic Major de Comptes, Vicent Cucarella, ha hecho esta mañana una enmienda a la totalidad de buena parte de la gestión del Consell, durante su comparecencia en Les Corts para valorar el informe de la Cuenta General de la Generalitat de 2019, el último ejercicio auditado. Cucarella ha destacado numerosas deficiencias en materia de contratación, personal o del estado económico de la Administración autonómica que ya contemplaba el informe de la Sindicatura en su informe y ha emplazado al Consell a ponerles solución de cara al próximo ejercicio. «Nuestra faena es desagradable porque detectamos lo negativo, pero ni vengo a proteger al Consell ni a atacarlo», ha dicho. Aunque no hay situaciones que puedan derivar en responsabilidad contable, la Sindicatura pone la vista sobre la gestión económica del presupuesto.
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El Síndic Major ha alertado de los incumplimientos en la contratación de emergencia, un tipo de acuerdo que marcará, seguro, el informe del próximo año, en el que se fiscalizará 2020, el año de la pandemia. Y es que en 2019, el último año auditado antes del coronavirus, la Generalitat «no cumplía los requisitos especiales» para numerosos contratos por urgencia o emergencia. «Me refiero a 2019...En «2020 habrá más casos, pero también en los que esté bien considerado que sea de esta manera«, ha alertado el auditor.
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El informe de la Sindicatura ya avisaba el año pasado de que había habido un aumento de la importancia relativa de la tramitación de emergencia, que pasó del 1,4% al 6,4% del total. Se tramitaron 90 contratos por un importe conjunto de 26,1 millones de euros, con la Conselleria de Sanidad como el área que más hizo uso de este tipo de contratos, con 47 de esos 90 expedientes, mientras que el mayor importe tramitado deemergencia fue contratado por la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.
En este ejercicio, además de los numerosos contratos de emergencia para material sanitario, el Consell cambió la ley a través de la ley de Medidas para establecer el contrato de emergencia como fórmula para todas las contrataciones relacionadas con la recuperación post-covid
La peor parte de la intervención del Síndic Major de Comptes se ha la llevado la Conselleria de Sanidad, gestionada por la socialista Ana Barceló. Cucarella ha censurado el uso de los contratos menores por parte de este departamento en las compras farmacéuticas sin consignación ni expedientes. «Es como ir a la farmacia y comprar medicamento», ha avisado. Pero revestido de contrato menor. «No lo es, porque no tienen expedientes. Y además, si así fuera, sería un fraccionamiento». Cucarella ha recordado también que Sanidad no ha hecho pública ni ha sido fiscalizada la orden de recepción de la concesión del Hospital de Alzira, tras su reversión. «No se ha podido comprobar el acta de recepción de La Ribera ni Intervención ha podido fiscalizarla«, ha lamentado, antes de desvelar que aún hay 37 liquidaciones pendientes de las cinco concesiones sanitarias(cuatro ahora) que la Generalitat tenía.
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