La tesorera de la Diputación, quinta baja en el consejo de administración de Divalterra

El consejo de administración de Divalterra se encuentra en una situación crítica. De los nueve miembros que lo componen, cinco han presentado su renuncia. La última en hacerlo, ayer mismo, fue la tesorera de la corporación provincial, Beatriz Moreno.

Con su salida, el número de vacantes en el órgano de gobierno de la empresa de la Diputación, heredera de la vieja Imelsa, ascienden ya a cinco. Y eso que el consejo estaba compuesto inicialmente por nueve miembros. Una situación que inhabilita a este órgano para gobernar la empresa

La marcha de Moreno se suma a la del representante de Cs en ese consejo, Jorge Ochando, que este jueves, en el transcurso de la reunión del consejo, anunció su renuncia. Un día antes había tomado la misma decisión el representante de Compromís, Emili Altur.

A ellos se suma la de José Javier Cuenca, Jefe de la Unidad de Preselección de la Diputación de Valencia, y la del exdiputado del PP, y ahora no adscrito, Carlos gil. En total, cinco bajas sobre un órgano compuesto por nueve personas.

El consejo de administración, que preside el diputado socialista Ramiro Rivera, se vio obligado el jueves a dejar sobre la mesa un informe elaborado por el jefe del área jurídica de Divalterra, José Luis Vera, en el que advertía de más de una docena de irregularidades en el proceso de selección del jefe de Recursos Humanos de la empresa de la corporación provincial.

El dirigente socialista decidió instar de manera urgente a que se convoque a la Junta General de la empresa para que adopte las medidas necesarias para poder desbloquear la situación y permitir la adecuada operatividad de la empresa y sus trabajadores.

La convocatoria es el próximo martes, justo tras un pleno extraordinario de la Diputación de Valencia. La junta tendrá que cubrir las cinco vacantes antes de abordar de nuevo el informe con las numerosas irregularidades detectadas. En el caso de aprobarse el documento, el consejo podría adoptar medidas drásticas con algunos responsables de la empresa, como el gerente de la misma, Antonio Mas.