Tres calabozos con videovigilancia

La Comandancia de la Guardia Civil de Valencia se convirtió ayer en el cuartel general de la Unidad Central Operativa (UCO). Mientras un gran número de periodistas se congregaban en la calle Calamocha desde primera hora de la mañana, tres de las personas detenidas en la operación Erial, Joaquín Barceló Llorens, Felisa López González y José Cotino Escrivá, pasaban sus últimas horas en los calabozos del acuartelamiento.

El día anterior habían rellenado y firmado un formulario de información con arreglo al protocolo establecido por la Secretaría de Estado de Seguridad para la custodia de detenidos en instalaciones policiales. De esta forma, Barceló, López y Cotino fueron informados de que iban a ser vigilados con un sistema de grabación de imágenes con cámaras instaladas dentro de sus celdas. Además, cada calabozo dispone de un sistema de comunicación con un pulsador. Así, el detenido puede requerir la presencia del guardia civil que controla los monitores del circuito cerrado de televisión en un caso de necesidad por algún incidente o indisposición.

La noche anterior, Eduardo Zaplana Hernández-Soro y Vicente Cotino Escrivá también firmaron el mismo formulario de información, como todas las personas que dan con sus huesos en los calabozos del cuartel de Patraix. Los agentes intervinieron los cordones de los zapatos, cinturones y cualquier objeto que portaran los detenidos, como una llave, en estricto cumplimiento del protocolo de prevención de suicidios.

Los agentes del Grupo de Delitos Contra la Administración de la Unidad Central Operativa (UCO) se hicieron cargo de los detenidos durante ocho horas para tomarles declaración. El expresidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, entró en el cuartel sobre las diez y cuarto de la mañana -tras ser trasladado desde Tres Cantos-, mientras que el expresidente de Les Corts y ex director general de la Policía, Juan Gabriel Cotino, llegó pocos minutos antes de las once de la mañana. Zaplana pisó las dependencias policiales en calidad de detenido, y Cotino lo hizo como investigado.