Puig reivindica la periferia frente al centralismo: «España no es Madrid»

La Comunitat celebró este lunes el Día de la Constitución en la Casa del Mediterráneo en Alicante con la asistencia de los más altos representantes de la Administración autonómica y los miembros del Consell. Las interpretaciones musicales de Sole Giménez animaron un evento que estuvo marcado por un intenso frío que padecieron todos los participantes.

El presidente Ximo Puig cerró el evento con un discurso que en algún momento pareció más en clave 9 d’Octubre que 6 de diciembre por aquello de reivindicar. Una vez más, volvió como ya hiciera en ediciones anteriores a sacar, aunque fuera tímidamente, la bandera del federalismo. Y esto pese a que en las citas precedentes supuso una airada reacción pública del presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón.

Puig, tras recordar las ocho Constituciones en dos siglos, reflexionó acerca de si hoy hubiéramos alcanzado el pacto de 1978 en un momento de evidente polarización. Hay que apostar, según el presidente, por reforzar dos puntos capitales recogidos en la Carta Magna: el trabajo en condiciones dignas y la igualdad de oportunidades.

Pero la vigencia también pasa por incrementar «el papel de las comunidades en la cogobernanza de España», una oportunidad para progresar de manera inclusiva. No quiso profundizar más en este concepto. Se refería, sin mencionarlo, a un avance de sus tesis federalistas. De nuevo, clamó por la necesidad de la reforma del sistema de financiación, «inaplazable» en el contexto actual. De cara a la futura negociación, anunció «voluntad de acordar, orillar el frentismo e invocar la confianza federal».

El jefe del Consell ofreció, además, una receta para «coser» las heridas territoriales con tres ingredientes fundamentales: «Ni España es Madrid, ni caben los independentismos, ni la periferia es segunda división».

El presidente ha hecho de las críticas a Isabel Díaz Ayuso una constante en sus comparecencias públicas. Este discurso le permite establecer un cara a cara con una de las referencias del centro derecha y ganar peso en el mundo de los barones socialistas. Son recurrentes sus ataques al dumping fiscal o su idea de repartir sedes e instituciones por el resto de España.

La fórmula para cohesionar el territorio, sin embargo, encuentra algunas lagunas en su propia actuación. Frente a su «no caben los independentismos», el presidente ha establecido un fluido contacto y cordial relación con el presidente Pere Aragonés al margen del proyecto soberanista que defiende.

El dirigente lamentó las escasas referencias de la Carta Magna a la ciencia pese a que ahora nos «ha salvado del colapso». El responsable aprovechó, en este sentido, para resaltar los beneficios de la vacunación. De hecho, defendió su extensión «sin egoísmos, ni mercantilismo, por decencia y por inteligencia».

La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, presentó a los galardonados por su especial defensa de los derechos fundamentales. La Plataforma Sense Llar fue una de las premiadas. Otra de las distinciones fue a parar al profesor Avelino Corma, doctor en Química y miembro de la Real Academia de Medicina de la Comunitat. La prestigiosa oncóloga Ana María Lluch también contó con el galardón de la Generalitat. De igual modo, completó el grupo de homenajeados Francisco Martínez Mójica.

Oltra, por su parte, también defendió en el acto la necesidad de una reforma de la Carta Magna ante los evidentes cambios que se han producido en los últimos 40 años.

• Temas
• Ximo Puig