La Guardia Civil detecta 19 huellas en los papeles del sirio, pero no las de Zaplana

No fue la única petición del letrado del principal acusado. La defensa preguntó acerca de si el tribunal conocía ya el resultado del análisis grafológico de los conocidos como los papeles del sirio, documentación hallada en la antigua vivienda del expresidente en Valencia y que propició el inicio del caso Erial.

Este jueves, el tribunal ha dado a conocer el resultado de la pericial encargada hace meses. La Guardia Civil ha detectado 19 huellas en los papeles, una de ellas palmaria, en el origen del caso Erial, pero ninguna corresponde a la de Zaplana.

Estos papeles ya fueron examinados hace unos meses. Entonces se buscaban restos de ADN en esa documentación. El servicio de Criminalística de la Guardia Civil recogió hisopos de los propios papeles, de los bordes de una funda de plástico y de la carpeta. Pero el resultado fue negativo. No había ADN del expresidente de la Generalitat. Este resultado fue utilizado por el exdirigente para desligarse por completo de toda esa documentación.

Sin embargo, faltaba, además, el análisis que se ha dado a conocer en la sesión del jueves. Esta prueba, que fue acordada en su día por la propia Audiencia, no había llegado al tribunal. La defensa desconocía el pasado miércoles si ya se había efectuado el análisis y nunca se informó del resultado o es que finalmente no se practicó. De hecho, los papeles originales se encuentran en la sala Tirant, a disposición del tribunal.

Ese ciudadano sirio, supuestamente confidente del CNI, entregó todo el material a Marcos Benavent, exgerente de Imelsa. Este los conservó y posteriormente se los dio a su abogado, Blasco Morales.

Finalmente, en el registro del despacho de este profesional, fueron requisados por los agentes de la Guardia Civil. Zaplana ha tratado de cuestionar la legalidad de esa entrada y registro para tumbar todo el recorrido judicial de Erial. El resultado de la prueba de ADN sostendría su tesis. Idéntico argumento se puede construir con las huellas.

Esos documentos están considerados como la «hoja de ruta» del supuesto amaño de las licitaciones por la Generalitat de las adjudicaciones del Plan Eólico y las ITV, así como del presunto cobro de comisiones ilícitas en el conocido como caso Erial.