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Viernes, 5 de octubre 2018, 14:32

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Los motores de Antonio Jordán han sido su mujer, Tere, quien falleció hace nueve años por una enfermedad degenerativa, y sus hijos, a los que se unió todavía más en la adversidad. Positivo por naturaleza, cualidad que han heredado Pablo y Antonio, se recrean en el pasado con cariño y una buena dosis de humor.

IRENE MARSILLA
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