Urgente Óscar Puente anuncia un AVE regional que unirá toda la Comunitat en 2027
La interiorista recorrió el Mediterráneo con un crucero en familia por las islas griegas. LP

El viaje inolvidable de... Eva Marcellán

Una escapada a los enclaves imprescindibles del país y un barco lleno de sorpresas marcaron el viaje de Eva Marcellán. Desde Santorini a Atenas, la interiorista ha disfrutado del Mediterráneo

ELENA MELÉNDEZ

Valencia

Martes, 18 de septiembre 2018, 00:40

Las vacaciones de verano de Eva Marcellán culminaron de la mejor forma posible la primera semana de septiembre, antes de que los niños comenzaran las clases. Y lo hicieron con un crucero en familia por las islas griegas. Bari fue el puerto de salida y, al embarcar, Eva no pudo evitar sentirse minúscula a bordo del enorme trasatlántico. «Mi marido Alfonso y yo hicimos hace años un crucero sin niños y en un velero de un tamaño mucho menor. Esta vez ha sido una experiencia buenísima, los niños son los que más han disfrutado, como no se podían perder se movían por el barco a sus anchas», explica.

Publicidad

El primer lugar donde atracaron fue Corfú, la segunda isla más grande de las jónicas. Allí cogieron junto a sus hijos un pequeño tren turístico que les trasladó por los puntos más significativos del municipio. Eva aprovechó para perderse por las calles del pueblo y allí descubrió una pequeña tienda de moda, arte y complementos que le fascinó. Dentro pasó un buen rato y uno de los dependientes le mostró la parte superior del comercio, «donde albergaban una colección de vestidos preciosos. Me contaron que la diseñadora fue invitada recientemente a una recepción de la reina de Inglaterra, la cual es admiradora de sus diseños», recuerda.

El pequeño bolso bordado a mano que Eva adquirió en una tienda de Corfú. LP

Tras esa mañana en Corfú volvieron a comer al barco y partieron a Mikonos, donde se quedaron dos días. La primera jornada cogieron un autobús y pusieron rumbo a Psarou, una playa de arena blanca y aguas turquesas donde se instalaron en un chiringuito. «El local era precioso. Estaba sobre la arena, con todas las sombrillas de tela a rayas blancas y azules y mobiliario de madera. Tomamos un Aperol Spritz».

Así es Santorini

Al día siguiente se subieron a un ferry para atracar en la isla de Delos, uno de los centros espirituales más importantes de la Antigua Grecia. Allí visitaron el puerto comercial, los Templos de Apolo y el Monte Cynthus. A la vuelta fueron a comer a un restaurante en la playa de comida típica; «pedimos una mousaka que estaba espectacular, ensalada de queso feta, unas verduras a la brasa deliciosas y boquerones fritos buenísimos. Tras disfrutar de un espectacular puesta de sol volvimos al barco».

Las travesías las realizaron por las noches. Una experiencia renovadora para Eva pues, pese a que a veces le cuesta conciliar el sueño, durante los días del crucero disfrutó de un descanso placentero que ella achaca al ligero vaivén de la embarcación. A la mañana siguiente se encontraban en Atenas.

Publicidad

Instantáneas del viaje familiar de Eva. LP

Una de las primeras paradas en la capital griega fue la Plaza Sintagma para ver el cambio de guardia que, cada hora, tiene lugar frente al parlamento griego; a Alfonso le hacía mucha ilusión. Posteriormente, visitaron el Partenón y dieron una vuelta por Plaka, el barrio que se encuentra a los pies de la Acrópolis, y que todavía conserva un encanto especial. Tras recorrer sus calles hicieron una parada en un café lleno de encanto donde les prepararon una limonada natural.

El último día de crucero les permitió llegar hasta la isla de Santorini, uno de los lugares más chic de todo el Mediterráneo, conocido por sus paradisíacas vistas. Allí subieron los más de quinientos escalones que dan acceso al municipio. Tras visitar el pueblo de Oia fueron hasta la playa de Kamari, donde comieron en una terraza. «Es un viaje perfecto para ir en familia. En el barco había música en directo, clases de cocina para niños, gimnasio, spa, biblioteca… por la noche organizaban fiestas temáticas y por el día bajábamos a tierra. Han sido unos días muy bonitos».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad