Acció Ecologista-Agró de Moixent apremia al Ayuntamiento a actuar cuanto antes en un puente del siglo XVIII en peligro de derrumbe

La asociación Acció Ecologista-Agró de Moixent ha llegado al límite de su espera para que el Ayuntamiento cumpla con su compromiso, aprobado por acuerdo plenario en 2016, de rehabilitar el Puente de Vahillo. Se trata de una infraestructura del siglo XVIII que está a punto de derrumbarse.

En octubre de 2016 se aprobó un acuerdo plenario en el que el Ayuntamiento, a cambio de no ejecutar una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, declarando ilegales las obras realizadas en el embalse del Bosquet, se comprometía, entre otras actuaciones, a rehabilitar este Puente de Vahillo, así como el Puente de las Casetas de Loma, de la edad media. A la actuación de este último no se ha llegado. Se lo llevó la Dana de 2019.

Es por ello que temen que un nuevo temporal termine derribando el de Vahillo, que se encuentra en un muy mal estado. De hecho, en 2020, la asociación ecologista instó su inclusión en la lista Roja del Patrimonio. "Estamos muy insistentes porque si el puente no se arregla en este año se va a caer", explica el portavoz de la asociación Santiago Gasset.

Apunta que a pesar del acuerdo plenario y las, en principio, buenas intenciones, ni los gobiernos municipales de PP, Ciudadanos y PP y ahora el PSPV aún no se ha hecho nada y, además de no cumplirse el acuerdo, teme que el puente finalmente se venga abajo.

Desde el Consistorio, el alcalde, Guillermo Jorques, explica que la restauración del puente ha contado desde 2020 con una partida presupuestaria, pero que primero fue la pandemia, que lo condicionó todo, y posteriormente se creyó conveniente hacer previamente un estudio arqueológico para conocer su valor y así poder concretar las actuaciones a realizar.

"El estudio concluyó que se debería catalogar como Bien de Relevancia Local, pero estamos valorando si antes de impulsar el proyecto, realizar unas actuaciones de urgencia", explica el primer edil de Moixent, quien apunta que una vez se obtenga dicha declaración toda la actuación estará condicionada por el visto bueno y los plazos de la Conselleria de Cultura, lo que podría ralentizar aún más las obras.

Cabe recordar que ya en el año 2018, Acció Ecologista-Agró solicitó a Conselleria dicha declaración tanto para este puente, como el ahora desaparecido. Al parecer ya había un expediente abierto al respecto en el Sevicio Territorial que llegó tarde para la infraestructura desaparecida. A raíz de este hecho, el colectivo instó a la administración autonómica a poner más medios materiales y personales para cumplir con la ley de Patrimonio.

En su escrito recordaban que en la misma se establece que “Cualquiera que tuviera conocimiento del peligro de destrucción, deterioro o perturbación en su función social de un bien del patrimonio cultural, o de la consumación de tales hechos, deberá comunicarlo inmediatamente a la administración de la Generalitat o al Ayuntamiento correspondiente, quienes adoptarán sin dilación las medidas procedentes en cumplimiento de la presente Ley.”

Esas medidas no se adoptaron y aunque estos bienes en concreto no contaban (ni cuentan) con protección alguna, consideraban que se debería haber actuado.

El puente se encuentra situado junto al Palacio de Vahillo, propiedad de los Marqueses de la Romana, en la partida del mismo nombre, a la salida de Moixent con destino a la Font de la Figuera. Consta de dos estribos y un solo vano.

El arco se realza con varias arcadas de ladrillos. La técnica constructiva empleada es de piedra seca para los estribos y los paramentos están hechos de piedra de la zona sin contar con sillería o piedra labrada hecha exprofeso para el tipo de construcción. El relleno está también hecho con material de la zona.

Del puente se ha caído una arcada de ladrillos y uno de los laterales de acceso al mismo, quedado descarnada esta parte.

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