Andorra temblará con la gran mascletà de Fallers pel Món

Las Fallas de 2023 todavía siguen en marcha. El 19 de marzo se quemaron la gran mayoría de monumentos, la semana siguiente fue el turno de algunos municipios que retrasan las celebraciones para contar con mayor participación y este fin de semana, el de las segundas Pascuas, tocará vivir la fiesta valenciana por excelencia en los Pirineos.

Fallers pel Món, la asociación que lleva las Fallas más allá de la Comunitat, viaja a Andorra este viernes para llevar a cabo todo el programa festivo. Este año será especial ya que se cumple una década de la creación de esta organización y lo conmemorarán con una gran mascletà en Andorra la Vella.

Para ello han puesto en marcha la iniciativa 'apadrina una carcasa' con la que falleros y empresas pueden colaborar aportando cinco euros para conseguir una disparà histórica. «Estamos sorprendidos con la aceptación, más de 300 personas han participado y se han apadrinado más de 500 carcasas. Esperamos disparar una mascletà con más kilos de pólvora que las de Valencia», ha comentado el presidente de Fallers pel Món, José Enrique Amores.

Además en la plaza andorrana se desplegará un mural en el que aparecerán las fotos de todos los promotores de esta iniciativa como muestra de agradecimiento por su implicación.

Pero éste no será el único acto especial del aniversario. El monumento que se plantará este fin de semana en Andorra también está cargado de simbolismo por los diez años de recorrido de Fallers pel Món.

La falla será más grande que en anteriores ocasiones y contará con diez escenas que representan a cada una de las ciudades que se han visitado durante esta última década. «El cuerpo central será un guiño a Andorra y el resto de recuerdo a los anteriores monumentos», ha añadido Amores. Así a través de la falla de 2023 se podrá conocer toda la historia de esta asociación que desde sus inicios no ha parado de crecer.

Este año serán más de 3.000 personas las que recorran los aproximadamente 500 kilómetros que separan Valencia del pequeño país pirenaico para volver a disfrutar de las Fallas. Una cifra que se espera que sea de récord ya que es la segunda vez que Fallers pel Món elige esta ciudad por ser una de las que mejor acogida tiene de los participantes.

La organización y los trailers con todo el material, monumentos, mesas, carpas, comida y un largo etcétera, saldrá el miércoles para que cuando el grueso de la expedición aterrice el viernes todo esté listo.

A partir de ese momento Andorra la Vella se transformará y el ambiente fallero invadirá el centro de esta ciudad de montaña. El viernes por la mañana la comitiva visitará los colegios de la zona para hablar de la fiesta y hacer partícipes a los más pequeños. Por la tarde-noche habrá un concurso de paellas y de madrugada, una verbena en la carpa instalada en el centro neurálgico.

El sábado por la mañana tendrá lugar el tradicional acto de la Crida desde la plaza Príncep Benlloch y varios pasacalles. Ya por la tarde, la devoción fallera se trasladará a la Ofrenda a la Mare de Déu dels Desemparats cuya imagen estará en la iglesia de Sant Esteve. La nit del foc será el preludio de la fiesta nocturna en la carpa.

El último día fallero en Andorra comenzará con una despertà y a medio día un desfile de Moros y Cristianos ya que Fallers pel món tiene el objetivo de llevar todas las tradiciones valencianas allá por donde va. La gran mascletà colaborativa será a las dos y por la tarde se preparará agua de Valencia para los asistentes y vecinos y habrá un concurso de charangas.

Por la noche el fuego será protagonista con la cremà del monumento viajero y así se pondrá fin al décimo aniversario de Fallers pel món.

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