Convocan una cacerolada en Llutxent para protestar contra la ampliación planta de biogás

La Plataforma SalvemLlutxent.Respirem ha convocado para esta tarde una cacerolada ante el Ayuntamiento en protesta contra la ampliación de la planta de biogás. El vecindario continúa así su lucha para que la instalación se reubique, ante los problemas, principalmente, de malos olores que, aseguran, vienen sufriendo en el último año.

A los vecinos no les vale la respuesta de Conselleria de implementar medidas correctoras para minimizar el impacto de la actividad y es por eso que aseguran que continarán en la lucha. «No hacemos nada más que protestar y reunirnos con el Ayuntamiento, pero no tenemos respuestas», aseguran desde el colectivo vecinal.

Además, con esta nueva protesta también quieren poner de manifiesto su rechazo a otro posible proyecto en otro punto del municipio. Se trataría de una planta para gestionar los purines del ganadado. Una iniciativa que partiría de los propios ganaderos.

La alcaldesa, Xaro Boscà, reconoce que hace ya tiempo los ganaderos sí que le transmitieron la intención de poner en marcha esa instalación, «pero se quedó en standby y en el Ayuntamiento no tenemos ninguna noticia nueva sobre este nuevo proyecto, no sabemos nada y, en todo caso, si lo hubiera, tenemos claro que se consultará y será el pueblo el que decidiera».

Con respecto a la planta actual, Boscà apunta que tampoco hay ninguna novedad. «De momento, Conselleria está realizando las inspecciones para la Autorización Ambiental Integrada», apunta.

Cabe recordar, que Conselleria anunció estas inspecciones para modificar la Autorización y también el instar a la empresa a implementar medias correctoras, pero en nada de reubicación. También se negaban desde la empresa que defendía la inversión realizada y que no se trataba de «un quiosco» que se pueda mover fácilmente.

Sin embargo, el vecindario aseguran que continuarán luchando por conseguir esa reubicación, contra la ampliación y contra el nuevo proyecto de tratamiento de purines, si finalmente se pone en marcha.

La cacerolada tendrá lugar a las 20 horas y se pide a los vecinos que acudan con los utensilios necesarios para que la protesta sea contundente.

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