La dirección del centro Carrasquer ofrece el comedor escolar para atender la demanda de las familias de la Escola d'Estiu de Sueca

El Ayuntamiento de Sueca ha conseguido una solución que atiende a medias las demandas de las familias de los menores usuarios de la Escola d'Estiu en el CEIP Carrasquer. Tras la reunión mantenida entre el concejal de Educación y la dirección del centro educativo éste ha ofrecido el comedor escolar, que cuenta con climatización, para desarrollar los talleres, ofreciendo la posibilidad de ubicar mobiliario de infantil, para adaptarlo a las necesidades de los más pequeños.

No se acepta, sin embargo, el uso del aula multisensorial. El centro argumenta que el material de este aula no ha sido sufragado por la Conselleria de Educación sino que su adquisición «ha sido fruto del esfuerzo del centro». Además, el centro insiste en que este el uso de este material lo realiza durante el curso escolar personal docente especializado, por lo que no consideran «adecuado que se utilice por los monitores de la Escola d'Estiu, ya que si se causara algún desperfecto en el material sería muy difícil su reposición».

No obstante, el centro se compromete a habilitar, coordinadamente con la empresa que gestiona la Escola d'Estiu, un espacio en el comedor con material que pueda atender al alumnado que lo necesite.

Así se lo ha transmitido el alcalde, Dimas Vázquez, en el escrito de respuesta al escrito presentado por las familias que pedían que se utilizaran las aulas de infantil para realizar las tareas de la Escola d'Estiu. Una solución que el centro ha considerado «no viable», según expone el alcalde en el escrito remitido a los padres, debido a que la dotación de «equipamiento que existe en estas aulas y las tareas que durante el mes de julio se han asignado al profesorado responsable de las aulas, hacen incompatible el uso docente con el uso lúdico de estas aulas».

Desde el centro se insiste en la necesidad de compatibilizar el uso lúdico del espacio para atender la programación de la empresa encargada del servicio de la Escola d'Estiu con el uso docente del centro durante el mes de julio y la necesidad de preservar el equipamiento del centro «que sería difícilmente reponible en caso de sufrir desperfectos».

El Ayuntamiento da, por tanto, solucionado el problema. Así lo confirma el concejal de Educación, Joan Carlos Vázquez, quien asegura que se «la situación ya se ha reconvertido» y que el Consistorio ha intermediado entre padres y centro y la dirección del Carrasquer «ha rectificado esos espacios que cedió para que pueda haber una convivencia entre profesorado y alumnado y se ha llegado a una solución de un espacio acorde con las necesidades de los niños».

Por su parte, los padres se alegran por que al final se haya tomado una medida «coherente y lógica» por el bien de los menores y que se haya escuchado a las familias. «No queremos nada más que el bienestar de los pequeños, que debería haber sido una prioridad desde el principio», manifiestan.

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