Ó. DE LA DUEÑA
CULLERA
Jueves, 6 de julio 2023, 13:46
El turismo valenciano actual no se entendería sin personas que hace décadas fueron visionarias. Es el caso de Enrique Torres, un marmolista y escultor de ... Cullera, que en el año 1969 tuvo la brillante idea de colocar en una ladera de la montaña de la localidad grandes letras que identificaban a la población desde lejos. El nombre de Cullera sobre su montaña está en el imaginario colectivo de todos los valencianos y de muchos turistas nacionales e internacionales.
Publicidad
Es más que obvio que Torres se inspiró en las letras de la meca del cine, donde precisamente este año el flamante cartel de Hollywood, con las letras en vertical, cumple un siglo; mientras tanto en Cullera las letras pintadas sobre la misma ladera celebran su 50 aniversario y desde el Ayuntamiento de Cullera ya saben que lo conmemorarán a lo grande.
En estos momentos, sólo han podido precisar que los actos «serán importantes y se han reservado para el mes de octubre», aunque inicialmente se pensó en realizarlos a partir del 1 de abril. Algo debe haber cambiado en los planes de la corporación local para buscar otra fecha y todo apunta a la respuesta que esperaba el primer edil de la localidad de la Ribera, Jordi Mayor, del alcalde de Los Ángeles, en Estados Unidos.
Mayor se puso en contacto con su homólogo para ver si existía la posibilidad de realizar algún tipo de celebración conjunta o de la participación de alguna comitiva americana en los actos que prevé Cullera y que, de momento, no quiere desvelar. En cualquier caso, la población valenciana puede hacer gala de la figura de Torres y de quienes creyeron en él a finales de los 60. Fue en 1969 cuando tuvo la idea y comenzó a preparar bocetos.
Publicidad
Tras años de trabajo, en 1973 se iniciaron las labores para acuñar el nombre de la población en la montaña. Fue con cal de horno tradicional de Carcaixent, muy cerca de Alzira. Desde allí salió el material que se subió hasta la Serra de Les Raboses para crear las letras de 130 metros de alto por 40 de ancho y que ocupan la superficie de un campo de fútbol.
Enrique Torres no era un empresario cualquiera. Pese a su labor de marmolista y escultor era un hombre cultivado que supo mirar a su alrededor para ver el futuro. La construcción a principios de los años 70 de la AP-7 por toda la costa valenciana la vio como una oportunidad y dio en la diana. Pensó en colocar las letras en la Serra de Les Raboses, casi en la parte más alta, de una forma estratégica para que pudiera verse al menos unos diez kilómetros antes de llegar a Cullera, tanto por el norte como por el sur.
Publicidad
El artista local, que también fue el creador de varios libros sobre la historia y las peculiaridades de la población, fue el encargado de editar guías turísticas en esos años, contribuyendo de forma decisiva al cambio de un pequeño pueblo que miraba a sus campos y vivía casi en exclusiva de ellos, con la excepción de algo de pesca, a ser un punto fijo de parada para el incipiente turismo nacional.
Eran años donde se veía que la figura del visitante era sinónimo de riqueza y de creación de infraestructuras y vías de comunicación. La AP-7 es un ejemplo, pero también se mejoraron carreteras nacionales y otras vías regionales para facilitar el acceso a estas poblaciones que empezaban a recibir un aluvión de vistas cada verano. Ya había destinos consolidados, como Benidorm y Torres vio que era el 'ahora o nunca' para ser una población turística de referencia.
Publicidad
Su trabajo ha dado sus frutos. La costa de Cullera es una de las más demandadas tanto por turistas valencianos como del centro de la península. Desde que se colocó el cartel el interés por conocer las playas de Cullera, tanto las del norte como las del sur del casco urbano, se disparó y pasó a ser uno de los grandes destinos valencianos. A partir de ahí llegó todo, hoteles, paseo marítimo y urbanizaciones.
Todo hasta llegar a la Cullera de hoy, una ciudad que mira al mar con cerca de 22.000 habitantes, cifra que se multiplica cada verano. Precisamente es la Cullera actual la sabe que el turismo y recursos como este cartel son clave para mantenerse y por eso se ha previsto la celebración para octubre. Desde el Ayuntamiento llevan meses trabajando en ello y, de momento, lo que sí se ha hecho es desbrozar la zona donde están las letras y repintarlas. Los trabajos se han llevado a cabo por un grupo de profesionales de trabajos en vertical, dado que están en una pendiente del 40%.
Suscríbete a Las Provincias al mejor precio: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Marc Anthony actuará en Simancas el 18 de julio
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.