PP y Ens Uneix se repartirán las carteras en la Mancomunitat de la Vall d'Albaida tras la renuncia de PSPV y Compromís a asumir responsabilidades

Finalmente no ha habido consenso en la Mancomunitat de la Vall d'Albaida y la intención del nuevo presidente, el popular y alcalde de Alfarrasí, Ismael Sanvictor, de que todos los partidos, además de estar integrados en la junta de gobierno, asumieran responsabilidades, no se ha conseguido.

PSPV y Compromís rechazaron en el pleno de este lunes asumir alguna cartera. En el caso de los socialistas ya lo habían dejado claro en las reuniones previas. Más sorprendente ha sido para los populares la postura de la formación nacionalista que, en principio, habían aceptado asumir la Gestión de Residuos y la cartera de Medio Ambiente y Agricultura.

«Dos minutos antes del pleno nos hacen saber que no asumirán las responsabilidades con la excusa de que la Generalitat va a cambiar la ley de Mancomunidades», señala Sanvictor quien apunta que a ninguno de los dos partidos «les interesa trabaja por la Mancomunitat».

El presidente ya tenía repartidas las carteras entre los consellers del PP, Ens Uneix y Compromís y ante este cambio de postura de última hora, indica que tendrá que reestructurar las competencias, por lo que no ha querido adelantar quién estará al frente de cada área.

Eso sí, la junta de gobierno sí estará integrada por cinco consellers del Partido Popular, cinco de Ens Uneix, dos de PSPV-PSOE y dos de Compromís y uno de los independientes de Montixelvo.

Desde Compromís, su portavoz, Julio Bioscas, justifica el cambio de postura tras conocerse este sábado la intención de la Generalitat de cambiar la ley de mancomunidades. «Una de las prioridades que dijimos cuando propusimos a Alejandro Quilis (el presidente inicialmente elegido para esta legislatura) como candidato a la presidencia era que había que modificar y adaptar los estatutos a la ley existente (la de 2018) como herramienta sólida, en la que todos los partidos creíamos, para resolver los problemas estructurales existentes. Al producirse este anuncio, nosotros necesitamos un compromiso más claro de seguir esa hora de ruta».

Bioscas, insiste en que  «siempre hemos defendido que primero había que establecer qué había que hacer antes que quién iba a hacerlo y no hemos encontrado detalles claros de cuáles son las prioridades del equipo de gobierno para poder establecer una relación de trabajo y de confianza».

Por su parte, los socialistas coinciden con Compromís en no ver una hoja de ruta clara. «Decidimos que no entraríamos a formar parte del gobierno porque no veíamos un plan de Mancomunitat convincente. Además, después de haber echado por tierra la gestión de los últimos años, no van a tener confianza en nosotros», asegura el secretario comarcal del PSPV, Fede Vidal.

«Hay trabajo y todos tenemos que coger delegación cuando antes ni PP ni Ens Uneix quisieron coger. Esto era normal  y ahora tenemos que aceptar, pero explicaciones no nos dan muchas y no nos han convencido», insiste.

También lamentan los socialistas que antes que abordar temas como el de la gerencia o el de la nueva concesión del servicio de recogida de residuos se plantee al pleno incrementar las retribuciones por asistencia a junta de gobierno y plenos. «Votamos en contra no porque no queremos que se valore el trabajo, sino porque si financieramente estábamos tan mal, que sea esta la primera medida no nos parece lo adecuado», subraya.

Y es que el presidente de la Mancomunitat elevó al pleno la propuesta de subir hasta 300 euros la asistencia a juntas de gobierno y establecer retribuciones al resto de miembros del pleno con 50 euros. Según explica Ismael Sanvitor, estas retribuciones tienen como objetivo «motivar a los consellers y que asuman su roll de una manera más participativa».

Desde Ens Uneix, el secretario de Organización, Jordi Vila, la decisión de Compromís de no asumir competencias cuando «el viernes dijo que sí» y califica de «excusa irrisoria» la esgrimida referente a la eliminación de las mancomunidades de ámbito comarcal por parte de la Generalitat.

 «Suena más a no querer colaborar y buscar una excusa donde no la hay porque, de ser así, esta Mancomunitat aún no estaba adaptada a la ley de 2018 y al final el nombre y la gestión es la misma, para la comarca», subraya Vila.

El también alcalde de El Palomar, apunta que dado los problemas de gestión y financiación con los que cuenta la entidad supramunicipal, «tendríamos que dejar aparte la política por responsabilidad y trabajar todos por mejorar los servicios».Las áreas que, en principio, iba a asumir Ens Uneix era de la gestión del refugio comarcal y Servicios Sociales, a través del propio Vila y el alcalde de Benicolet, Iván Martínez, así como lar presentación de la entidad comarcal en la Fundación Universitaria Campus Ontinyent y en e el Fons Valencià per la Solidaritat, a través de la primera teniente de alcalde de Ontinyent Natàlia Enguix. Aunque, tras la renuncia de Compromís a la gestión de residuos y Medio Ambiente, podría asumir también alguna de estas.

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