El PP de Xàtiva apoya a los vecinos del Carraixet ante el retraso en el servicio del agua potable

Nuevo rifirrafe entre el Partido Popular de Xàtiva y el gobierno local. En esta ocasión a cuenta de la situación de los vecinos del Carraixet que, en el pleno municipal de la pasada semana, mostraron su queja por no contar con agua potable nueve meses después de que se instalar la desnitrificadora, como solución a los problemas de potabilidad del agua en esta urbanización.

 El Partido Popular de Xàtiva ha mostrado su apoyo incondicional a las demandas de los vecinos del Carraixet. «Es una vergüenza que después de casi cuatro años, los vecinos del Carraixet sigan sin agua potable. Qué más tiene que pasar para que este gobierno cumpla con su palabra?,  ha señalado Marcos Sanchis, portavoz del PP, que acusa de »ineficacia« al gobierno local que »pagan los vecinos«.

Sanchis también exige «una tarifa justa y proporcionada» para estos vecinos. «Es intolerable que se haya fijado un precio tan elevado para un servicio que ni siquiera es potable» y ha insistido en la necesidad de medidas transitorias, como el suministro de agua potable en cisternas o ayudas económicas para la compra de agua embotellada mientras se resuelve la situación.

Por su parte, desde el Ayuntamiento, el gobierno local, desmiente las palabras del portavoz del popular, subrayando que no han dejado de trabajar para ofrecer soluciones a los vecinos.

«El Ayuntamiento adquirió el pozo del Carraixet con el objetivo de solucionar los problemas de potabilización del agua que los vecinos han sufrido durante décadas. De hecho, sorprende la desmemoria de los populares en este tema, ya que en 20 años de gobiernos de Rus, donde participó Marcos Sanchis, no se preocuparon en ningún momento de resolver el problema del agua  y, no contentos con ello, subieron el IBI de manera desorbitada al transformar el diseminado en zona urbana».

Recuerdan que, tras estudiar distintas alternativas, se optó por la más viable, la construcción de la planta potabilizadora, previa adquisición por parte del Ayuntamiento de los bienes y derechos donde se ubica el pozo, así como el derecho de extraer agua para garantizar el suministro correspondiente, con una inversión que supera los 150.000 euros.

Desde el Consistorio explican que «para la eliminación de nitratos se ha elegido la tecnología menos contaminante y más respetuosa con el agua y el Medio Ambiente, mediante un tratamiento biológico que transforma los nitratos en gas nitrógeno. Esta solución técnica ofrece ventajas como la retención de bacterias y microorganismos en los gránulos de los filtros biológicos o un caudal de rechazo muy reducido», lo que significa que no generan aguas residuales y con un bajo consumo energético en todo el proceso.

Sobre el retraso en la puesta en funcionamiento, como ya explicaron en el pleno el alcalde y el concejal responsable, explican que los técnicos están llevando a cabo una serie de ajustes técnicos hasta que el sistema ofrezca los niveles adecuados de salubridad de forma permanente, dado que se trata de un tratamiento innovador.

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