Alzira es la ciudad de más de 40.000 habitantes de la provincia con la deuda por habitante más baja

El Ayuntamiento de Alzira ha presentado los presupuestos para 2023, las últimas cuentas de la legislatura y del gobierno de Compromís y PSPV antes de las próximas elecciones. "Es un presupuesto de la estabilidad y de la gestión óptima porque se ha reducido la deuda sin aumentar los impuestos", ha destacado el alcalde de Alzira, Diego Gómez.

Este año la ciudad cerrará el ejercicio con 2,7 millones de euros de deuda mientras que en 2015, cuando se produjo el cambio de color en el Consistorio, esta cifra ascendía a 16 millones de euros, lo que supone una reducción del 83 %. Por su parte, la deuda por habitante es de 61 euros lo que sitúa a Alzira como la ciudad de más de 40.000 habitantes con menos endeudamiento de la provincia de Valencia.

"En ocho años no hemos realizado ninguna operación de crédito nueva y sólo quedan tres por amortizar pese a la situación delicada en la pandemia", ha comentado Gómez.

El presupuesto total asciende a 46.705.614 euros en los que la mayor parte de gastos se destinan al capítulo de personal con 22.4 millones de euros (un 48% del total). Esta partida se ha aumentado en 1,2 millones para el próximo año debido, principalmente, a las actualizaciones de sueldo que obliga la ley.

Además, se ha decidido aumentar las nóminas de los trabajadores con los salarios más bajos como subalternos, algunos trabajadores de las escuelas infantiles y conserjes. "Unos 300.000 euros se destinan a estas subidas para que sea más justo y estos empleados tengan una mayor remuneración. Pese a esto, el capítulo de personal ha bajado en porcentaje respecto al total", ha señalado el concejal de Hacienda, Albert Furió.

La previsión de gastos corrientes también se ha incrementado en más de un millón de euros respecto a las cuentas de 2022 teniendo en cuenta la subida de precios de la energía y por ello se ha pasado de 15,6 millones a los 16,7 del próximo ejercicio.

La mayoría de partidas en las diferentes concejalías se han mantenido en cifras similares a las de este año. Una de las que ha sufrido un recorte es la dedicada a las fiestas de Sant Bernat que ha bajado en 74.000 euros, siendo su total para la confección de la programación de julio de 103.000 euros.

Los miembros del equipo de gobierno han justificado este descenso en la prioridad de mantener las asignaciones a todas las entidades locales y han señalado que la cantidad para las fiestas podrá aumentar más adelante con cambios si son necesarios.

Al capítulo de inversión se han destinado 3,7 millones de euros aunque se pretende llegar a los cinco añadiendo el remanente de 2022. La cantidad más alta se destinará a acabar las obras en el polideportivo Fontana Mogort con 1,3 millones de euros de los que más de 800.000 provienen de una subvención.

También se contempla acabar de pagar la sentencia a la familia Suñer por el polígono de Albalat con 631.000 euros. Además el próximo año se comprará el local donde está ubicado el Punto de Encuentro Familiar, con 140.000 euros.

En 2023 también se ampliarán las oficinas de Idea para aumentar el número de aulas (50.000 euros) y se continuará con el camino del antiguo 'trenet' (240.000 euros).

Además el Ayuntamiento de Alzira convertirá el actual retén de la Policía Local, que en enero se trasladará al nuevo edificio, en un museo para albergar la colección que ha donado la familia del artista Antonio Ballester.

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