Alzira usa modelos matemáticos para reducir los daños causados por las inundaciones

Una de las iniciativas tecnológicas en las que se avanza es la utilización de modelos matemáticos en el análisis de la red de saneamiento y drenaje urbano frente a inundaciones. En el caso de Alzira este sistema permite coordinar con antelación y organizar las actuaciones para reducir el efecto de las avenidas.

Los modelos matemáticos permiten reproducir el comportamiento del agua, tanto en las redes de desagüe como en las cuencas externas. Este plan director, en marcha desde 2017 en Alzira, va mejorándose año tras año con la instalación de sensores en puntos de riesgo, pozos o con la instalación de estaciones meteorológicas que permiten conocer la evolución de condiciones meteorológicas y acortar el tiempo de respuesta.

Estas actuaciones posibilitan mejorar el protocolo de actuación, explica la jefe de Servicios Públicos, Xelo Bisbal, movilizar a menos gente en la detección de avenidas, ya que la llegada de caudal está monitorizada y se puede realizar el seguimiento desde el departamento municipal. Sabiendo el riesgo real se puede movilizar al personal necesario para preparar la ciudad para la llegada de las aguas, por lluvia, por los barrancos o por el río, abriendo los sumideros, limpiando las zonas de arbolado e informando de cada cambio en la población.

En este sentido, el Ayuntamiento de Alzira ultima el Plan de Actuación Municipal frente al Riesgo de Inundaciones de Alzira, un documento en fase de preparación y que está previsto que se apruebe entre diciembre de 2021 y enero de 2022.

Este plan permite organizar la respuesta municipal ante situaciones de alerta por inundaciones. «En Alzira hay dos grandes factores a tener en cuenta. El escenario de cambio climático ha aumentado la incidencia de las alertas: entre 2018 y 2020 hemos vivido cuatro episodios de grandes lluvias; el sudeste está muy afectado, y es que el casco urbano se ha desarrollado en zonas de elevada inundabilidad», recuerda el técnico de Medio Ambiente, Sergi Abril.

El documento tiene en cuenta todos los factores que afectan Alzira y que hacen que «todo el término se vea comprometido por riesgo de inundación: campos y núcleo urbano». Además, el Plan Municipal prevé la creación de la estructura y organización de los recursos y efectivos y permitirá constituir un Centro de Coordinación de Emergencias Municipal.

Los graves episodios sufridos en los últimos años provocan que las inundaciones sean uno de los grandes problemas de Alzira. Esta misma semana se conoció el informe de la Universidad Politécnica que detallaba las actuaciones urgentes para reducir el riesgo. La principal obra es la de ampliación del barranco de la Casella, reivindicada durante décadas y que sigue sin estar en los planes de la Confederación Hidrográfica del Júcar. Una actuación de gran envergadura que el Ayuntamiento no puede asumir y por lo que espera ayuda del Gobierno.