El TSJ anula la modificación de las ordenanzas de Carcaixent que supuso el incremento de algunos impuestos

El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha anulado la modificación de las ordenanzas municipales llevadas a cabo por el Ayuntamiento de Carcaixent en 2019 con una nueva sentencia. 

El TSJ considera que el equipo de gobierno no respetó los plazos legales de exposición pública, privando a los ciudadanos del trámite de audiencia requerido por la ley, y provocando así una indefensión que motiva la nulidad de todas las modificaciones de las ordenanzas aprobadas. Unas ordenanzas que supusieron el incremento de algunos impuestos municipales y que generó malestar entre los vecinos y tensión entre las diferentes formaciones políticas.

De hecho, este procedimiento se inició por parte del PP de Carcaixent que alegó que no se habían respetado los trámites para modificar el IBI, el Impuesto de Circulación, el Impuesto de Actividades Económicas y la tasa de basura.

"Estamos muy satisfechos de haber podido revertir la abusiva subida de impuestos que intentó el equipo de gobierno. Los ciudadanos de Carcaixent sufren una de las presiones fiscales más altas de la comarca, y ahora más que nunca necesitan un respiro que les ayude a recuperar cuanto antes la estabilidad financiera de sus hogares, comercios o proyectos", ha destacado la portavoz de Populars de Carcaixent, Carolina Almiñana.

Cabe recordar que hace unos meses el mismo tribunal ya emitió otra sentencia anulando estas mismas ordenanzas tras un recurso interpuesto por Units per Carcaixent. En esa ocasión, se consideraba que los plazos se habían cumplido pero anulaba la urgencia con la que se tramitó la modificación.

De esta forma, la decisión no ha sorprendido al equipo de gobierno al ya encontrarse suspendidas estas normas municipales. "Sabíamos que existía el riesgo de que se anularan pero los ingresos se necesitan para mantener los servicios o si no habrá que optar por reducirlos", ha comentado el alcalde de Carcaixent, Paco Salom.

La anulación de la subida de impuestos supone la reducción en 1,2 millones de euros el presupuesto. Este año se mantendrán las ordenanzas de 2019 y en el próximo ejercicio se volverá a plantear un cambio. "Los partidos de la oposición deben ser coherentes y realistas", ha añadido Salom que recuerda que se debe decidir ya que esa cantidad es necesaria para el día a día del consistorio.

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