Colas nocturnas por un aparcamiento en Cullera

Pero también se ha convertido en una 'lucha' conseguir una plaza en los aparcamientos públicos que ofrece el Ayuntamiento durante los meses estivales. La alta demanda de estos espacios hace que cada año los interesados tengan que esperar durante horas en la calle para intentar conseguir su plaza.

Aunque este año el consistorio intentó que estas imágenes no se repitieran abriendo cita previa y un proceso telemático para reservar las plazas, esto no ha sido suficiente porque una vez más la calle se ha llenado de gente durante horas para intentar conseguir un aparcamiento.

Muchos afectados critican la poca antelación con la que se ha anunciado la apertura del proceso, de un día para otro, y que no se haya realizado por vías oficiales al haberse publicitado por redes sociales y mensajería instantánea. Además, muchos de los interesados en alquilar estas plazas de estacionamiento no son residentes habituales de Cullera por lo que han tenido que desplazarse para intentar optar a una de las últimas plazas ofertadas.

Estas personas, además, lamentan que en el reparto se dé prioridad a los vecinos empadronados por lo que los veraneantes, que tienen vivienda en Cullera, finalmente tienen que alquilar plazas privadas con un precio mucho más elevado.

«Se ha avisado con muy poca antelación y no por canales oficiales. Hemos tenido que acudir desde Madrid para hacer cola para intentar conseguir una plaza. No es aceptable esto para realizar un trámite administrativo«, denuncia uno de los afectados que año tras año sufre estos problemas.

En su caso, estuvo en la cola desde las seis de la tarde hasta la una de la mañana el pasado viernes cuando la Policía Local disolvió a la gente ya que todavía estaba en vigor el toque de queda. Los agentes tomaron nota de las personas que estaban esperando para que al día siguiente mantuvieran su turno.

Pero por si existía algún problema, esta familia volvió a las cinco de la mañana al día siguiente a esperar que abrieran la garita del aparcamiento. Como ellos, muchos otros propietarios de segundas residencias que hicieron noche en Cullera para obtener uno de estos lugares municipales.

Toda una odisea para conseguir una de las 150 plazas de estacionamiento público que quedaban libres en La Rada, de las 500 totales. Y es que éste es uno de los espacios con más demanda de Cullera al encontrarse más céntrico.

Los afectados critican que se consideren canales oficiales las redes sociales ya que muchas de las personas que están interesadas en estos aparcamientos son mayores que no tienen acceso a este tipo de comunicaciones.

Algunas de las personas que estuvieron realizando cola durante horas quisieron interponer una reclamación pero aseguran que no les facilitaron una hoja oficial al carecer de ellas los encargados de este trámite.

Desde el Ayuntamiento de Cullera niegan que esta forma de proceder para alquilar los estacionamientos de verano genere polémica y recuerdan que todavía hay plazas en el de Enrique Chulio.

Mientras, este año la cosa se ha complicado un poco más ya que el parking de Caminàs todavía está en obras y sus plazas no han sido ofertadas.

La alta demanda se debe a que muchos edificios antiguos no cuentan con parkings comunitarios y además los precios (unos de 88 euros en julio y 110 en agosto) son mucho más bajos que los de alquiler de plazas privadas en la zona de costa.