Un lustro del incendio de Carcaixent

El fuego arrasó más de 2.200 hectáreas en total y 1.910 sólo en Carcaixent, lo que supone que afectó a más de un tercio de su termino municipal y a gran parte de su masa forestal. Un terreno que cinco años después se está recuperando de forma natural ya que en la zona no se han realizado trabajos de reforestación.

«Va más rápido de lo que pensábamos pero tardará todavía en recuperar su estado original», comenta el alcalde de Carcaixent, Paco Salom, que recuerda que las replantaciones han sido «testimoniales». Desde el Ayuntamiento se planteó hace unos años alguna actuación aérea que no fue aceptada por la administración autonómica responsable.

Una de las principales preocupaciones era la erosión del terreno debido a las frecuentes lluvias torrenciales que podía causar todavía más daños en este espacio natural, pero pese a que no se ha actuado la naturaleza ha frenado esta erosión y la vegetación ha empezado a crecer sobre un paisaje devastado.

Tras la movilización inicial, tanto ciudadana como institucional con la creación de grupos de trabajo y mesas postincendio, cinco años después se siguen sin conocer las conclusiones que se extrajeron de las reuniones celebradas en 2016 y 2017. Encuentros que buscaban evitar nuevos incendios en la zona y aumentar su protección. En este sentido, el Ayuntamiento de Carcaixent realizó una consulta ciudadana en la que los vecinos apostaron porque parte de la masa forestal fuera pública.

El consistorio negoció con los propietarios de la zona del Realenc para intentar adquirir estos terrenos pero no se consiguió un avance. «No ha habido un antes y un después de este incendio, la administración puso mucho interés al principio pero luego continuó todo igual», señala el alcalde aunque a él sí le marcó esta fecha debido al gran impacto ambiental y el riesgo que supuso para algunas zonas habitadas que tuvieron que ser desalojadas como el hospital de la Barraca o una residencia de ancianos.

Un avance en estos cinco años es que Carcaixent ya cuenta con su Plan Local de Prevención de Incendios Forestales, documento necesario para todos los municipios, que recoge los mecanismos para minimizar el riesgo de incendios forestales y establecer las medidas a adoptar para evitarlos. En el último pleno se aprobó de forma provisional a falta de que finalice la exposición pública. Entre otras medidas preventivas, el plan contempla mejorar la conectividad de la red viaria en espacios forestales.