Un centenar de parcelas abandonadas hacen de Marxuquera un «polvorín» ante incendios

Los vecinos de las distintas urbanizaciones de Marxuquera reclaman que se limpien los huertos que hay abandonados en todo el distrito. El motivo de esta exigencia es que temen que en caso de incendio estas parcelas se conviertan en un «polvorín» y las llamas se propaguen devorando campos, hectáreas de montañas y las urbanizaciones que pillen a su paso, afectando a unas 1.500 personas de tres urbanizaciones.

En estos momentos, los residentes calculan que hay más de un centenar de terrenos de cultivo que han sido abandonados y que desde hace años, algunos más de una década, carecen de cuidado alguno: «Esto ha hecho que la maleza crezca y que algunas hierbas malas estén cubriendo los naranjos», indicó la portavoz de las Amas de Casa de Marxuquera, Amparo Muñoz.

La dirigente expuso este problema en la última Junta de Distrito de Marxuquera. La representante del colectivo indicó que en la reunión se habló de este problema y se pidieron soluciones al presidente de la entidad, al edil de Gandia, Xavi Ròdenas. Muñoz agregó que los vecinos mostraron su malestar y su preocupación con la situación.

«Son muchos los terrenos que hay descuidados y en algunos casos están muy cerca de núcleos urbanos. Esto hace que sean un peligro en caso de incendio. Muchos vecinos del distrito están asustados», aseguró.

Muñoz explicó que ese pánico que reina entre los residentes radica en que la temporada estival está a la vuelta de la esquina y «desgraciadamente cada verano se producen incendios». «Tememos que algún desalmado prenda algún fuego a cualquier parcela y que las llamas corran como la pólvora por todo el distrito», aseveró.

Para Muñoz el problema radica en que estos terrenos están repartidos por todo el distrito y se encuentan tanto entre huertos conservados como junto a terrenos de bosque y muchos de ellos junto a tres de las urbanizaciones más pobladas: Montepino, Montesol y Llosar.

Estos residenciales reúnen a medio millar de vecinos cada una, de ahí la preocupación existente. Por todo ello, en la Junta de Distrito se solicitó a Ròdenas que el gobierno de Gandia tome cartas en el asunto y que haga todo lo posible para que estos terrenos estén limpios antes de que llegue la temporada estival.

Trabajo duro

«Sabemos que es un trabajo duro, pero hay que acometerlo por la seguridad de todos», agregó la vecina de Marxuquera. En la reunión se propuso crear una lista a modo de inventario para ubicar cada una de estas parcelas «peligrosas».

El objetivo, añadió, es que el gobierno inste a los propietarios de los terrenos a limpiarlos y retirar la maleza: «Ròdenas explicó que el gobierno no puede hacerse cargo de los trabajos por la escasez económica que atraviesa y pasar luego la factura a los dueños de los campos», como se ha hecho en solares de Gandia en años anteriores.

Pero esto, apostilló, no debe ser un obstáculo para trabajar y reducir este número de terrenos que suponen un riesgo para la seguridad del distrito. De hecho se acordó en la sesión que sea el ejecutivo local quien se ponga en contacto con los propietarios. «Si el Ayuntamiento no puede acometer los trabajos debe exigir a los dueños de las parcelas que las mantengan en un estado óptimo, ya que en estos momentos suponen un peligro para las tres urbanizaciones que están más cerca: Montepino, Montesol y Llosar». Todas ellas suman casi 500 chalés, lo que supone que residen en estas zonas unas 1.500 personas.