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Ó. DE LA DUEÑA
Villalonga
Miércoles, 16 de junio 2021, 23:41
Las familias de Villalonga están más que cansadas de esperar reformas en el instituto Vall de la Safor que no llegan. La Asociación de Madres ... y Padres de Alumnos (AMPA) ha exigido al centro, al Ayuntamiento y al Consell que se habiliten más barracones ante la saturación del recinto de secundaria y bachiller y se reparen las deficiencias.
«Los estudiantes no tienen las mismas garantías de formación que los de otros centros. No pueden hacer uso de la biblioteca, de laboratorios o de aulas de música. Todos estos espacios están destinados a la docencia por la falta de espacio que sufre el instituto y la masificación de alumnos«, explicó Isa Gomis, presidenta del AMPA.
Desde el AMPA denuncian que el centro presenta muchas deficiencias: «Hay humedades junto a muchas ventanas, en los pasillos hay filtraciones que generan desprendimientos y el patio está por pavimentar. Todo lleno de arena. Pero, además, los jóvenes entran en el centro toda esta tierra, mediante el calzado, y el barro en los días de lluvia«.
La dirigente del colectivo afirmó que han pedido en varias ocasiones «más aulas prefabricadas», pero que no llegan. El AMPA denuncia, además, la dejadez que sufre el centro por parte de la Conselleria de Educación. Recordó que cuando comenzó este curso les prometieron un aula auxiliar de «grandes dimensiones» para poder dejar libre algunos laboratorios, que no ha llegado. «Nos han dicho que no habrá ni para septiembre», agregó
«Parece que se han olvidado de Villalonga. No sabemos nada de la reforma y ampliación del centro, pese a que hace dos años que el Ayuntamiento entregó el proyecto para sumarse al Pla Edificant y construir un aulario nuevo para acabar con la situación actual«, añadió Gomis.
Humedades y desprendimientos en uno de los pasillos.
Por todo ello exigen una remodelación «inmediata del instituto» y que se coloquen barracones para dar más espacio a los alumnos. «No es la solución definitiva, de hecho ya hay prefabricadas en el patio, pero los alumnos merecen disponer de los laboratorios que ahora son clases, como música, tecnología o química.
Desde el consistorio, el edil de Educación, Vicent Ferrer, explicó que en breve tendrán una reunión con responsables del Consell para ver qué pasa con el proyecto de reforma, que se presentó hace dos años. Reconoce que hay goteras, humedades y poco espacio en el patio, aspectos que hay que solucionar.
Pero Ferrer añadió que la dirección del centro entiende que la mejor opción es «intentar agilizar la reforma del instituto, en lugar de colocar más barracones». El instituto reúne a 600 alumnos, pese a que se pensó para 400. Reconoce que parte de la masificación se debe a la reordenación que se hizo hace unos años y llegaron los estudiantes de La Font.
Indicó que en esta población vecina se está construyendo un Centro de Infantil, Primaria y Secundaria que reducirá el colapso. Las familias no comparten estos argumentos: «No podemos esperar tres años más para que acabe la saturación en el Vall de la Safor».
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