Un pueblo valenciano con una curiosa historia detrás de su cabalgata de Papá Noel

Papá Noel, Santa Claus, San Nicolás o Sinterklaas. Cada cultura tiene su propio nombre para denominar a ese hombre de barba blanca que posado sobre su trineo recorre el mundo repartiendo regalos. Y aunque la tradición en España marca que somos más de Reyes que de Papá Noel, en Miramar (Valencia) hace casi 40 años que 'su majestad' hace una parada.

Esta localidad de la comarca de La Safor, cada 25 de diciembre, desde principios de los años ochenta cuenta con su particular cabalgata de Papá Noel. Fue durante la legislatura 1979-1983 cuando el concejal socialista, Jesús Ferrer, «pensó en trasladar la cabalgata de Reyes al día 25 de diciembre, para que todos los niños y niñas del pueblo pudiesen disfrutar de los regalos durante todas las vacaciones», cuenta Antoni Marí, vecino de Miramar.

Tras la puesta en marcha del cambio, Melchor, Gaspar y Baltasar visitaban esta localidad dos semanas antes de repartir los regalos por el resto del mundo. El propósito era bueno, pero dada la incongruencia de que sus majestades llegasen de Oriente el día de Navidad, unos años después, se decidió sustituir las figuras de los Reyes Magos por la de Papá Noel. Un personaje popularizado en todo el mundo por el anuncio de la marca Coca-Cola durante la primera mitad del siglo XX.

Por este hecho, cada mañana del 25 de diciembre, Papá Noel llega a Miramar. Pero no lo hace solo. Va acompañado por la Unió Musical Milamarina. Los músicos de la banda, que participan en la cabalgata desde la inauguración de la entidad musical en 1991, recorren las calles del pueblo junto a su majestad y le acompañan con villancicos a repartir los regalos. Uno por uno, los niños -cuyos padres han hecho la comanda el fin de semana anterior-, reciben de la mano de Santa Claus y sus duendes navideños los presentes. Y así, año tras año, desde principios de los años ochenta, Papá Noel reparte personalmente cientos de regalos en Miramar.