El fiscal pide procesar por homicidio al detenido por la muerte del cofrade de Gandia

El detenido por la muerte del cofrade de Gandia se enfrentará, con toda probabilidad, a penas derivadas de los delitos de homicidio o asesinato, robo con violencia y estafa continuada. Estas fueron las peticiones que hicieron ayer el Ministerio Fiscal y la acusación particular al magistrado que dirige el caso en la capital de la Safor.

La fase de investigación no ha finalizado, pero el juez celebró una "comparecencia para concretar la imputación", es decir, escuchar a todas las partes y ver qué penas piden y hacía dónde encaminar el proceso. La investigación avanza en dos vertientes. Por una parte, se conoce la autopsia, que revela que el hombre murió por asfixia mecánica ante los golpes que recibió y que no consumió drogas, contradiciendo al arrestado.

Además, los informes policiales desmontan la versión que dio el detenido ante el juez hace meses, como por ejemplo que no se llevó llaves de la vivienda, cuando todo apunta a que sí. Estos dos factores y la información que maneja el magistrado le han permitido escuchar a todas las partes. Fiscalía y acusación particular piden, con los datos que ya tienen, el procesamiento por esos tres delitos, mientras que la defensa solicitó la absolución.

El joven fue arrestado a las pocas semanas de la muerte del cofrade, que falleció atado en su casa con bridas a la cama y torturado el pasado mes de febrero. Todo ello, presuntamente, para conocer los datos bancarios y poder obtener dinero en efectivo. El chico, amigo de la víctima, habría ido a su casa a hacer algunas chapuzas, pero acabó, supuestamente, apaleando al hombre para que le diera las claves de las tarjetas y de sus cuentas.

De hecho, se fue de la vivienda y se llevó el coche del hombre, que inicialmente dijo que fue un encargo de la víctima para que hiciera unas reparaciones. Además habría sacado dinero en un cajero de Gandia el mismo día en que se certificó la muerte del hombre, se llevó su móvil.

Apagó el dispositivo y borró conversaciones y fotografías realizadas el día de los hechos. En Valencia gastó miles de euros en tiendas de ropa, telefonía, maquillaje y locales de prendas deportivas, además se sacar dinero en distintos cajeros.

Fue arrestado a las pocas semanas y tanto en su primera declaración como en otra posterior negó haber acabado con la vida del cofrade. Sostuvo que se fue de la vivienda y estaba vivo. Dijo que el muerto consumió drogas, algo que la autopsia ha desmentido. El cofrade pertenecía la hermandad de Jesús Nazareno y estaba vinculado a oenegés de Gandia.

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