Gandia ataja una plaga de procesionaria que amenazaba el pino del Torreó de la Muralla

Los operarios del Ayuntamiento de Gandia han atajado una plaga de procesionaria que amenazaba al pino que hay ubicado en el Torreó de la Muralla, entre las calles Alzira y Sant Rafael.

Vecinos de la zona alertaron al consistorio de la presencia de esta oruga, que es letal para los pinos y también para cualquier animal que la ingiera, perros por ejemplo.

Ante esta situación, el departamento de Gestión Responsable del Territorio de Gandia envió a técnicos en la noche del domingo para que rociaran tanto el árbol como toda la construcción con producto para acabar con la bacilus thurengiensis, nombre científico de esta oruga.

La edil del área, Alícia Izquierdo, explicó que esta acción ha sido clave para evitar que la procesionaria cause daños en el Torreó del Pi, un espacio donde siempre ha habido un ejemplar de este tipo.

La concejal de Compromís añadió esta acción se suma a los trabajos que realiza el departamento para frenar el avance de la procesionaria en el reto de Gandia.

"Se han aplicado hasta 35 trampas contra esta oruga en pinos de centros públicos y de zonas verdes cercanas al casco urbano de Gandia", añadió.

Izquierdo explicó también que se está investigando cómo esta plaga que se suele dar sólo en entornos forestales llega a pinos que están aislados, como es el caso del Torreó.

El Torreó del Pi es una construcción medieval, del siglo XVI. Es obra de la ampliación de la ciudad que llevó a cabo el cuarto duque de Gandia, Francisco de Borja, que creó nuevas vías como la Vilanova y se habilitaron este tipo de torres defensivas.