Gandia retoma una urbanización tras 14 años parada y legaliza más de 300 viviendas

El Ayuntamiento de Gandia ultima los trámites para iniciar la última fase de urbanización de Marenys de Rafalcaid, un barrio marítimo situado en el margen derecho de la desembocadura del río Serpis. Esta actuación supone retomar unas obras paralizadas durante 14 años, tras dos sentencias judiciales contra el consistorio y la quiebra de la constructora.

La iniciativa pretende acabar con la situación de "irregularidad" de más de 300 viviendas y medio centenar de parcelas donde se podrán levantar nuevas casas, como precisó el vicealcalde de Gandia y el edil de Urbanismo, Pep Alandete.

"Durante todos estos años no se han podido dar licencias de obras para nada, construir un porche o una piscina, y los propietarios que tienen parcelas tampoco podían edificar nueva viviendas", precisó el concejal.

La memoria técnica ha pasado ya al departamento de Contratación del Ayuntamiento, por lo que se confía "que en unos dos meses la obra salga a licitación". Los trabajos tendrán un coste de medio millón de euros, que pagarán los propietarios.

Las obras que quedan pendientes en Marenys son, fundamentalmente, las relacionadas con el cableado eléctrico y telefónico. "Durante los últimos meses se instó a los vecinos a que adaptaran sus parcelas para que las empresas suministradoras introduzcan el cableado", añadió.

En estos momentos, Contratación ultima la licitación: "Está cifrado en medio millón de euros y serán los propietarios quienes paguen los gastos de esta última fase". Lo que sí está claro, remarcó el vicealcalde, "es que no se girará la cuota a los vecinos hasta que la obra esté completamente acabada".

La intención es, añadió, que el proyecto esté licitado antes del verano y las obras arranquen durante el periodo estival o en septiembre. La urbanización de Marenys arrancó en 2005 en un gobierno del exalcalde José Manuel Orengo.

Los residentes denunciaron el proyecto ante la Justicia, que les dio la razón hasta en dos ocasiones, ya que se giraron las cuotas sin un informe de Demarcación de Costas. Además, la empresa constructora entró en quiebra económica.