Un hombre se atrinchera en su casa con un arma y amenaza a sus vecinos en Llocnou de Sant Jeroni

Terror en la pequeña población de Llocnou de Sant Jeroni, a unos pocos kilómetros de Gandia. Eso es lo que se ha vivido después de que un hombre español de 35 años de la población se atrincherara en su casa y amenazara a sus vecinos con diversas armas, una de ellas larga, muy potente y peligrosa.

Ante esta situación, acudieron hasta el lugar agentes de la Guardia Civil, que fueron alertados pasadas las seis de la mañana de una discusión en un hogar y de que una hombre estaba saliendo a la ventana mostrando distintas armas y lanzando panfletos de contenido religioso a la vía pública.

El temor que alguien resultara herido hizo que los efectivos de la Benemérita establecieran un cordón de seguridad, al existir verdadero riesgo de que algún vecino que transitara por la vía pública o los propios agentes resultaran heridos.

El hombre, que padece esquizofrenia, mostraba un arma larga por la ventana, es decir, un tipo de herramienta de fuego pesado y de elevada potencia que hay que sujetar con las dos manos con un trípode y apoyar sobre el hombro, aunque desde el Instituto Armado no han precisado qué tipo de arma es de forma precisa.

Ante esta situación, los agentes intentaron abrir una negociación «que fue costosa», como han indicado fuentes del Ayuntamiento de Llocnou. «La gente estaba muy asustada, también los familiares, ya que la situación se derivó de una discusión y se agravó debido a la enfermedad que padece el hombre», han apostillado.

Los familiares, que estuvieron presentes en todo momento, explicaron a los agentes que el hombre padece esquizofrenia y que desde algún «tiempo no se toma la medicación», lo que le estaba ocasionando brotes ocasionales.

Los efectivos insistieron en su negociación con el hombre e intentaron persuadirle de que depusiera su actitud y bajara a la calle. Pero esto, al principio, sólo agravó la situación, ya que el hombre se metió en la vivienda y poco después se asomó una vez más a la venta «esta vez provisto de un arma larga con trípode y mira telescópica comenzando a insultar y amenazar a los usuarios de la vía».

La situación comenzó a agravarse ante el miedo de vecinos y familiares. Pese a todo, los efectivos de la Benemérita insistieron en la mediación y lograron convencer al hombre para que cambiara de actitud, quien bajó de forma voluntaria el arma.

Finalmente, dejó las armas en su casa y salió a la calle de forma pacífica «accediendo él mismo a los ofrecimientos de los Guardias Civiles para ser atendido por los servicios sanitarios». Los efectivos entraron a la vivienda y los familiares entregaron voluntariamente las armas que el hombre atesoraba. Incautaron el arma larga exhibida, además de otra arma corta (ambas de airsoft) y otras dos blancas que el detenido guardaba en su domicilio.

Tras el suceso, el hombre fue trasladado en ambulancia a la unidad de psiquiatría del Hospital Francesc de Borja de Gandia para ser tratado. Se le atribuye un delito de desórdenes públicos. La actuación ha sido llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil pertenecientes a la Compañía de Gandia y las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Gandia.

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