Una religiosa empaquetando helados en el Monasterio de Santa Clara de Gandia. LP

Las Clarisas de Gandia fabrican y venden helados para costear los gastos del monasterio

Las monjas de clausura entregan los dulces a través de un torno donde se les pueden pedir oraciones

Martes, 4 de julio 2023

Las monjas de Santa Clara de Gandia han encontrado una fórmula para obtener ingresos y mantener los gastos del monasterio ubicado en la plaza María Enríquez de Gandia. Las religiosas se han lanzado a la fabricación de helados, como ya hicieron el pasado ... año y que, todo apunta, les dio buenos resultados.

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Las Clarisas, como son conocidas en la capital de la Safor, son una orden de «hermanas pobres», como han precisado, y esto les obliga a idear formas para lograr financiación. Con la fabricación y venta de helados «buscan encontrar una forma de sustentación para el monasterio, ya que la única fuente de ingresos para el sostenimiento son las limosnas». Ahora el beneficio de la venta de helados, como han indicado fuentes de la Archidiócesis de Valencia.

El verano pasado, según han informado desde el Real Monasterio de Santa Clara, la venta de helados fue un éxito, y este año han querido «volver a emprender esta iniciativa». «Para ello piden la colaboración de los fieles y de la ciudadanía», con el fin de que adquieran estos productos durante los meses de verano y poder así aumentar sus ingresos.

Las Clarisas son monjas de clausura, por lo que la forma de comunicarse con ellas es a través de un torno. «La venta de helados supone también una oportunidad para conocer a las religiosas, ya que son numerosas las personas que se acercan al torno y piden oraciones, o también pasan por la capilla que permanece abierta 24 horas al día».

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Un congelador donde conservan los helados. LP

El Museo de Santa Clara, que alberga parte de las obras propiedad del Real Monasterio, es otro de los espacios más visitados de Gandia, con obras de maestros de la pintura y la escultura valencianos, españoles y de otros países de unos siete siglos.

«Escuchar y rezar»

Para las Clarisas no sólo es una función económica sino también pastoral, pues «esto ayuda a que muchas personas nos conozcan y puedan hacernos partícipes de sus necesidades». «Nosotras nos hemos consagrado al Señor para escuchar y rezar por las necesidades de los fieles», han señalado desde Santa Clara.

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«La elaboración de los helados para nosotras supone un esfuerzo, pero mientras preparamos los helados estamos rezando por las personas y familias que van a consumirlos», añaden las monjas. El horario para comprar los helados es de 10.30 a 13.30 horas y de 17 a 20.30 horas de lunes a domingo, excepto los jueves. También se pueden hacer pedidos llamando al teléfono 96 287 10 93.

Desde la Archidiócesis han indicado que la producción y venta de helados es «sin lugar a dudas esta una oportunidad para que los vecinos de Gandia y visitantes puedan conocer el Real Monasterio de Santa Clara, ayuden a su sostenimiento y degusten unos helados que ya fueron un éxito el pasado año».

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