Oliva iza la bandera amarilla en la playa de Les Deveses hasta que tenga los análisis del agua

El Ayuntamiento de Oliva ha colocado de forma indefinida la bandera amarilla en la playa de Les Deveses. El motivo de esta decisión se debe a la aparición este domingo de una mancha que cubre unos siete metros de mar y que levantó todas las alarmas tanto en la Ciudad Condal.

El edil de Turismo de Oliva, Kino Calafat, descartó que esta aparición se deba a cualquier tipo de elemento «contaminante», pese a que el río Molinell desemboca justo en este tramo y es la frontera geográfica entres las provincias de Valencia y Alicante para las comarcas de la Safor y La Marina. «Se barajan varias hipótesis, entre ellas que sean restos algas», indicó.

En cualquier caso y para prevenir cualquier tipo de incidente, Calafat ha decidido colocar de bandera amarilla en este tramo de playa: «Es una medida de seguridad. Nada indica que esta mancha tenga un origen contaminante, más bien al contrario. Todo apunta a que sea un banco de restos de algas o alguna planta», precisó el edil de Turismo de Oliva.

Pese a ello, durante la mañana de ayer, él mismo acompañó a técnicos municipales a recoger muestras de Les Deveses para remitirlas a un laboratorio que realice un análisis exhaustivo del agua. Es más, estas muestras se recogieron de varias playas, no sólo del tramo donde ha aparecido la mancha.

De forma paralela, Calafat señaló que técnicos de la Conselleria visitaron también ayer Les Devesses para recoger muestras a agua de la playa y conocer el origen de la mancha cuanto antes, así como descartar que se trata de un elemento contaminante.

No es la primera vez que aparecen en esta zona este tipo de manchas en el agua. Según indican algunos vecinos del municipio de Pego que veranean desde hace años en este punto de la costa a medio camino entre la Safor y la Marina Alta.

Apuntan que se debe, principalmente a dos fenómenos, el primero de ellos el choque entre aguas dulces, las que llegan del río Molinell, y las saladas del mar. Esto, indican, hace propicia la zona como lugar de pesca, «muchos aficionados plantan aquí su caña porque saben que en estas aguas campan a sus anchas muchos peces».

El segundo de ellos, explican, se debe a un cambio de corrientes, «habitualmente las corrientes llegan de Dénia hacía Oliva, pero este fin de semana hubo un pequeño cambio de dirección que provoca ese color tan raro y a la vez característico de la zona».

Aseguran que la desembocadura del río Molinell «hace mucho tiempo que presenta esta estampa, de hecho este año el olor y el color del agua es menor al de otras campañas estivales. Era insoportable, no puedes estar con los niños».

Respecto a las causas del «mal estado» de las aguas que surcan el Molinell, muchos vecinos de la zona, tanto de la parte de Oliva como de Dénia, comentan que se debe a que existe «un número considerable de viviendas que vierten directamente las aguas fecales al río». Remarcan que desde hace unos años la situación ha mejorado, «siempre se ha dicho que hay cierta urbanización en la zona de Dénia que no ha tenido nunca depuradora, aunque algunos de los propietarios confirman que ya han solucionado el problema».

Los residentes de la zona señalan a los consistorios como los culpables de la situación. En Dénia, se quejan de que están «dejados de la mano de Dios. Al estar tan alejados de la ciudad parece que los políticos no tienen tiempo de venir a ver como tenemos que vivir aquí los veranos».

De hecho denuncian que tras años reclamando, «todavía tenemos problemas en servicios básicos como la luz o la recogida de basura».