El Portuarios sigue la línea trazada por Moratal y firma otro triunfo en Alcàsser

Salva Moratal es el técnico del milagro del Portuarios Disarp. Bajo su dirección estos años, el equipo ha consolidado su plaza en Regional Preferente muy a pesar de competir en inferioridad de condiciones con la mayoría de clubs de la liga. Controla como pocos las situaciones que se dan en los equipos de la zona baja y estas semanas lo ha vuelto a demostrar después de ver a los suyos contra las cuerdas y anunciar la reacción.

La victoria en Alcàsser (0-3) ante un rival directo da la razón al técnico que en la víspera habló de que se acercaban dos partidos que cambiarían el estado de ánimo del equipo, la afición y el club. Acertó de pleno, como también había acertado cuando, tocados de muerte semanas atrás, vaticinó que los resultados lejos de mermar la moral del grupo, la cambiarían radicalmente y a positivo.

El Portuarios, que no había ganado hasta la fecha, ha sumado seis de seis puntos posibles en dos jornadas consecutivas y esto lo ha hecho ante rivales directos, lo que le da un valor doble a lo conseguido porque le ha permitido salir del atolladero en el que se había metido después de casi toda una vuelta sin ganar. La próxima semana el rival será el Alginet, otro equipo inmerso en la lucha por eludir el descenso, y completar el tres de tres acabaría con el vaticinio de Moratal que auguró unas vacaciones tranquilas y de alivio: «Se vienen dos jornadas que nos pueden dar todo lo que nos ha negado el fútbol en tres meses».

Quien no parece atravesar un buen momento, al menos de resultados, es el Tavernes. El equipo de Esteban Cana empató en Jávea, resultado aceptable por la entidad del rival, pero que ahonda en el traspiés cedido en casa ante el colista y en la derrota anterior en Muro donde, por cierto, mereció mejor suerte. Un balance de dos puntos de nueve posibles que le han descabalgado de la segunda plaza y le mantienen a cuatro de los puestos de promoción.

La jornada para los equipos de la comarca la completó la derrota del Racing Rafelcofer en l'Olleria donde una jugada a balón parado sentenció un choque en el que los de José Enrique Lluch debieron sumar como premio a su trabajo defensivo. Ahora, la situación se enturbia situándoles de nuevo a dos partidos de la zona caliente de la clasificación.