Un hombre abusa de una menor de 14 años en el ascensor de un hotel de Gandia

Un caso de abuso sexual a una niña de 14 años. Estos dramáticos hechos han sucedido, presuntamente, en Gandia, en uN hotel donde el Estado tiene alojados a inmigrantes sin papeles, a refugiados y a familias sin una procedencia clara. Los hechos tuvieron lugar el pasado miércoles sobre las 21 horas en el establecimiento, donde no hay alojados turistas.

El presunto agresor es un refugiado sirio que está hospedado en el hotel desde hace meses y que, como todos los alojados, sale varias veces al día por la playa, como se puede observar cada jornada. El hombre de 21 años al regresar para acudir a su habitación, subió en el ascensor del hotel y coincidió con una niña de 14 años, que también estaba hospedada en el local.

Durante el trayecto entre plantas, el hombre, presuntamente, abusó de la joven, metiéndole la mano en la vagina durante el tiempo que estuvieron en el ascensor. La niña, al parecer, se quedó inmóvil al no saber reaccionar ni defenderse ante un hombre mas mayor y fuerte.

El supuesto agresor salió del ascensor cuando llegó a la planta en que se encontraba su habitación, dejando a la niña en el lugar de los hechos. La joven acudió a su habitación donde junto a ella estaban su padre y su madre, todos de Europa del Este. Los padres vieron a la niña afligida y al saber lo ocurrido acudieron a la recepción del hotel.

Los empleados al escuchar la historia llamaron a las fuerzas de seguridad, que acudieron con rapidez. La Policía Nacional llegó para investigar lo ocurrido y se llevó detenido al hombre sirio. El refugiado estuvo en el calabozo hasta que pasó a disposición judicial. El supuesto agresor y la niña, prestaron declaración.

Tras esto, se decretó una orden de alejamiento del hombre sirio hacia la niña, por lo que ha tenido que abandonar el hotel de la playa, donde sólo hay inmigrantes y refugiados. De momento, se desconoce a donde lo habrá trasladado el ministerio, dado que es el Estado quien se encarga de pagar la estancia de todas estas personas. El motivo de que estén en hoteles es que no hay suficientes centros adecuados para ellos en España y esto obliga a recurrir a estos alojamientos.

Según han indicado fuentes consultadas, el Estado paga a los hoteles 49 euros por noche por cada uno de los inmigrantes o refugiados alojados, algo que en Gandia ha molestado mucho a sectores del turismo, ya que hay hoteles que se han visto obligados a cerrar en invierno debido a que no les compensa el programa del Imserso, el plan de turismo de invierno para la tercera edad: «Querían pagarnos poco más de 20 euros por anciano. Hemos tenido que cerrar».

El sirio, tras pasar ante el juez, ha quedado en libertad, y es muy probable que haya sido trasladado a otro hotel en la Safor, aunque no se descarta que lo hayan trasladado a otra comarca.

Cabe recordar que hay ciertas diferencias entre inmigrantes ilegales o sin papeles y los refugiados. Los primeros han llegado a España de alguna manera ilegal, mientras que los segundos piden estar en el país al sentirse perseguidos en sus países por distintos motivos, ya sean políticos, cuestiones religiosas u orientación sexual.

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