La Ribera y la Safor se alían a favor del bienestar animal

Tres comarcas, 51 municipios y dos refugios animales. Éstas son las cifras del proyecto pionero que están poniendo en marcha en la Ribera y la Safor con el objetivo de ofrecer un servicio de recogida y control de animales sin hogar adecuado a las necesidades sociales y de la futura Ley de Bienestar Animal que se aprobará próximamente.

Los refugios se instalarán en Tavernes de la Valldigna y en l'Alcúdia, dos ubicaciones que se encuentran a menos de 30 kilómetros de cualquiera de los municipios de ambas comarcas. Cada uno de los núcleos zoológicos podrá albergar más de 200 perros además de contar con múltiples servicios para estos animales y también para gatos.

De momento, el Ayuntamiento de Tavernes propone ceder una parcela (propiedad del consistorio) de más de 3.000 metros cuadrados ubicada junto a la estación, mientras que el de l'Alcúdia también ofrece la cesión de un solar de más de 4.000 metros cuadrados cerca de la cooperativa. Ambos terrenos cuentan con los requisitos necesarios para albergar las instalaciones de custodia y acogida.

Un proyecto ambicioso que se empezó a gestar en 2018 y que estará en funcionamiento en enero de 2023 ya que en estos momentos se van a redactar los proyectos de construcción y actividad y buscar la financiación.

En este sentido, a la presentación de este nuevo servicio asistió la consellera de Agricultura, Mireia Mollà, que aseguró que apoyará económicamente este proyecto ya que se enmarca dentro de los objetivos de la Ley de Bienestar Animal.

"La ley contempla inversión para infraestructuras y para fortalecer las protectoras. La conselleria se va a implicar para que salga adelante y se cumplan los plazos", afirmó Mollà.

Y es que la construcción de estos refugios supone 557.000 euros por instalación además de unos gastos de 180.000 euros anuales que sufragarán los municipios adheridos con una cuota de 1,34 euros por habitante.

"Esta cantidad es superior a la que pagan ahora los municipios pero se trata de un servicio mucha más ambicioso y de calidad", explicó el gerente de la Mancomunitat de la Ribera Alta, Sergi Machí.

El precio o que algunas localidades todavía tienen contratos en vigor con empresas para este servicio provoca que no todas se hayan sumado a la iniciativa. En el caso de la Safor, las dos ciudades más grandes como son Gandia y Oliva no forman parte del proyecto aunque no se descarta que en un futuro se añadan estos u otros municipios. En la Ribera sí entran Alzira y Cullera pero no se han incorporado Sueca o Carcaixent.

Será el Consorci de la Ribera el que se encargue de la dirección de ambos refugios a través de veterinarios y la gestión se licitará a favor de las protectoras de animales interesados. El objetivo es fomentar la adopción de los animales, consiguiendo el sacrificio 0 y también su cuidado y concienciación social con talleres que se podrán realizar en las propias instalaciones de Tavernes y l'Alcúdia.

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