Dónde está el Sant Cristòfol que ha desaparecido del acceso de Oliva

Una de las imágenes más icónicas de la ciudad de Oliva ha desaparecido de su emplazamiento habitual. Se trata de la escultura de Sant Cristòfol, que hay ubicada en el acceso norte de la población, a la altura del Cuartel de la Guardia Civil. Durante décadas, una hornacina ha sido el sitio donde se ha expuesto esta figura, y pocos era los que entraban en Oliva y no veían el monumento.

Ahora todo son incógnitas donde sobre estará la talla y por que ha desaparecido desde hace unos meses. En este emplazamiento hay una especie de construcción, donde se reserva un espacio para el santo, patrón de los conductores, con cristales a los dos lados para que pueda verse desde todas las direcciones.

Pero ya no está allí. El motivo es que la Asociación de Chóferes de Oliva ha decidido restaurarla ante el estado de deterioro que ha sufrido en estas décadas. La figura, pese a estar protegida por cristales, no se la librado del impacto diario del sol, que ha dañado los colores, ni tampoco de la humedad, que ha generado desperfectos en la base de la talla y en algunas otras partes de la escultura.

Pues bien, para recuperar y devolver su esplendor a esta imagen, el colectivo ha puesto en manos de un experto de Gandia en materia de restauración, José Manuel Montagud, el arduo trabajo de devolverle todo el esplendor. El profesional ha explicado que la obra ha llegado dañado, con los colores deteriorados, «ya en casi tonos pastel, de tantos años dándoles el sol».

Otros tramos de madera como la base o las andas, tampoco han sido ajenas al paso del tiempo. En este caso la humedad que trepa desde el suelo ha generado daños en los materiales de madera, creando partes escamadas que ponían en serio peligro el futuro de la tradicional imagen de Oliva.

En estos momentos, el profesional de Gandia ultima la restauración de la obra y en «cuestión de días o semanas volverá a su emplazamiento original, eso sí, con los colores originales y con ciertas reparaciones, ya que entre otros daños sufría problemas en varios dedos que ha habido que reconstruir», han precisado desde Taller Montagud.

El experto ha explicado que se requerido un trabajo minucioso, dado que la figura tiene más de medio siglo, y pese a estar en la hornacina ha sufrido daños derivados de la humedad y la luz solar, ya que carecía de algún tipo de filtro protector. En cualquier caso, se confía es que la imagen estén en su sitio el próximo 10 de julio, momento en el que se celebrará la fiesta de los chóferes de Oliva.

«Es una tradición de nuestros padres que no queremos que se pierda y por eso, aunque algunas personas no estamos en ese sector, impulsamos esta fiesta», ha precisado uno de los integrantes de la comisión.

Los trabajos han tenido una duración de entorno a un mes, donde ha participado dos restauradores, que tienen, prácticamente lista la figura. Montagud ha precisado que tantos años en la hornacina han hecho que los daños hayan ido a más en este tiempo, lo que ha hecho que la restauración haya tenido que se minuciosa, ha indicado el experto.

Desde la Asociación han destacado la importancia que tiene para su colectivo esta imagen, ya que muchos de sus padres fueron chóferes y que hoy en día la entrada norte de Oliva ya no se concibe sin la imagen de San Cristòfol en la hornacina.

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