Quieren desahuciar a un octogenario por dar de comer a las palomas

Se llama Francisco Barrera y es un hombre de ochenta años, discapacitado, enfermo de cáncer y con residencia en Granada. Barrera se encuentra en peligro de desahucio por la denuncia de un vecino que lo acusaba de "dar de comer a las palomas" en un patio exterior.

Esta mañana estaba previsto que se cumpliera la resolución sobre la vivienda, ubicada en el barrio de San Ildefonso. Sin embargo, no se ha podido ejecutar por la intervención del proyecto social Stop Desahucios, que convocó una concentración para evitar que quiten la casa en la que el anciano vive desde hace casi 50 años en régimen de alquiler social.

La denuncia fue interpuesta por el presidente de la comunidad de vecinos. "Dar de comer en un patio exterior del edificio a gorriones y palomas era un delito que debe castigarse con la expulsión del anciano de su vivienda", ha declarado el presidente a los medios locales.

"¿Cómo es posible que por echar de comer a los pajarillos desde mi ventana quieran sacarme de mi casa, cuando saben que no tengo dónde ir? No sé qué juez ha podido obrar de esta forma. Yo nunca le hice mal a nadie, ni he tenido nada malo con mis vecinos y, además, ya no les echo de comer a los pajaritos", ha manifestado Barrera a la plataforma.

El portavoz de Stop Desahucios, Antonio Redondo, anunció su intención de presionar a Emuvyssa, la empresa de vivienda y suelo del Ayuntamiento de Granada, para que Francisco Barrera mantenga su vivienda cuyo contrato de arrendamiento es de por vida.

Francisco Puentedura, portavoz del grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Granada, mostró su indignación: "me sorprende que en todo este proceso ni Emuvyssa, que cuenta con trabajadores sociales, ni los propios Servicios Sociales del Ayuntamiento se hayan puesto en contacto con el afectado, que es una persona mayor de 83 años en situación de dependencia que quieren dejar en la calle".

Por su parte, Emuvyssa y su consejera delegada, Isabel Nieto, aseguran no compartir "la urgencia del lanzamiento", además de que aclaran que han "instado a la comunidad de propietarios a que pospongan la ejecución de la sentencia solicitando asimismo, sin éxito, una reunión extraordinaria de la comunidad, para exponer a los vecinos la situación médica del inquilino".