El turno de Cayetano

Famoso desde la cuna, modelo, empresario, aspirante a cineasta, filántropo... pero sobre todo torero. Cayetano Rivera (Madrid, 1977) ha vuelto a los ruedos dos años después de su retirada. Su única oreja en su reaparición no le abrió la puerta grande de la plaza de toros de Jerez, pero sí le ha puesto de nuevo en el candelero. Sobre todo tras brindarle a su novia, Eva González, su capote de paseo y su segundo toro. "Poco que decir y mucho que sentir", resumió la exmiss tras un día de nervios en el que se mostraron más enamorados que nunca. Los rumores de boda siguen acechando a una de las parejas más envidiadas del cuore desde hace cinco años. Nada de pasar por el altar por el momento. Ahora toca el turno de lucirse a Cayetano, a secas, como aparece en sus carteles taurinos... aunque, como buena pareja de celebrities, cuentan con su propio nombre artístico para su unión: Cayeva.

Hace un mes el diestro de ojos verdes que cautivó a Armani y Loewe comenzaba una cuenta atrás muy especial. Se recluía en el campo junto a su cuadrilla con la vista puesta en una fecha en el calendario: el 16 de mayo comenzaba su temporada. Hasta entonces, treinta días de intensa preparación física, toreo de salón, vídeos... La familia quedaba reducida a la mínima expresión por más famosa que sea. Tocaba puesta a punto integral, porque en este tiempo desconectado de los toros el hijo de Paquirri solo cogió el capote en dos tentaderos. "Quería quitarme por completo y no coquetear con él", comentó el diestro unas semanas antes de un regreso que curiosamente ha coincidido con el de su hermano Fran. Ambos se despidieron al mismo tiempo del albero y han vuelto a la vez. No ha sido un plan premeditado de la dinastía Ordóñez. Ellos apelan a la "casualidad".

Durante estos meses, Cayetano no ha toreado en plazas, pero los astados que se ha encontrado fuera de ellas le han propiciado faenas en las que ha tenido que tirar de sangre torera. Para empezar, su lesión en directo en El Hormiguero de Pablo Motos. Una caída le fracturó el peroné y le llevó directo al quirófano del doctor Ángel Villamor, uno de los médicos del Rey. Las muletas se convirtieron durante meses en sus fieles compañeras en su retiro al igual que una medallita de San Judas.

El santo no le hizo librarse de la puyita de su exmujer, Blanca Romero, por no ocuparse de su hija Lucía. A sus 17 años, la chica podría coincidir perfectamente con su padre en alguna pasarela de alto copete, ya que la ha fichado la misma agencia de Eugenia Silva, Jon Kortajarena o Almudena Fernández. Los líos familiares se completaron en este periodo de supuesta tranquilidad con la bancarrota de su hermano Julián Contreras y los comentarios de Kiko Rivera sobre los objetos personales de Paquirri, así como la revelación de que Carmina Ordóñez habría podido perder su custodia justo antes del fallecimiento del torero en Pozoblanco. Todo aderezado con su ruptura sentimental con Eva González a finales de 2013, motivada por su incompatibilidad de agendas, la distancia y el fuerte carácter de la presentadora sevillana.

Nueve meses después, la chispa volvía a saltar entre ambos tras el viaje solidario, a lo Phileas Fogg, que le cambió la vida al torero tras recorrer 80.000 kilómetros por los cinco continentes y dormir en 17 camas distintas. Un periplo que pagó de su bolsillo. Las aportaciones de los patrocinadores se fueron directamente a los proyectos sociales de su Fundación Yo Niño. Desde entonces, Cayeva no se han separado y se muestran más empalagosos, hasta el punto de compartir en redes sociales las tazas con sus iniciales mientras pasan juntos la gripe en el piso que se compraron cuando volvieron a intentarlo. Él se declara fan número uno de Masterchef, incluida la versión junior. Pero también en este tiempo sin toros ha seguido la participación de su hermano Kiko en Gran Hermano Vip o se ha echado unas risas con Quién quiere casarse con mi hijo. Hasta ha confesado creerse parte de la historia del pequeño Nicolás.

Con líderes empresariales

Su agenda se ha completado con un curso de dirección general de empresas en el IESE Business School, una de las mejores escuelas de negocios del mundo, dependiente de la Universidad de Navarra. Antes de desempolvar los libros compartió un programa de quince días con empresarios líderes en nuestro país, entre ellos el consejero delegado del grupo Porcelanosa, José Vicente Roca. Y con compañeros de talla como el propietario de ElPozo o la directora de gestión del Instituto Valenciano de Oncología. «Los toreros y los emprendedores se parecen porque ambos lo arriesgan todo», detalló tras su primer contacto con los estudios. Y sus faenas en los negocios son de lo más diversificadas. No logró arrebatarle a su hermano Fran la concesión de un mercado gourmet en Sevilla, pero sí se comenta que participa en negocios de chatarra y que comparte un restaurante con Santiago Segura en Madrid. También convirtió la finca familiar de los Ordóñez en Ronda, El Recreo de San Cayetano -donde descansan los restos de Orson Welles y se dieron su primer sí, quiero Fran y Lourdes Montes-, en un hospedaje rural con todas las comodidades del siglo XXI.

Precisamente a la tierra de su abuelo regresará en septiembre para formar parte de una corrida goyesca que se presume muy emotiva, justo cuando se cumplen diez años de su alternativa en esa plaza. Se especula con que compartirá cartel con su hermano, empresario del coso malagueño, pero aún no se ha desvelado si habrá alguna sorpresa más, como ocurrió en la edición en la que vistió un traje de luces diseñado por Armani (en 2007 se habló de su relación con Roberta, la sobrina del diseñador italiano, y relaciones públicas de la firma) con lentejuelas y pequeños cristales de Swarovski. Por el momento, parece seguro que de la firma italiana no saldrá un traje de novio. A Cayetano le toca centrarse de nuevo en el mundo de los toros. Al menos, esta temporada.