Seat patrullará las calles de Italia

El orgullo del motor italiano ha quedado herido tras vencer la marca española Seat en el concurso de adjudicación que decide quién proveerá de nuevos automóviles a los Carabinieri y a la Polizía di Stato -homólogos de la Guardia Civil y la Policía Nacional españolas- durante los próximos tres años. No era una pugna cualquiera, pues los agentes de la autoridad italianos nunca habían perseguido a la mafia en coches de rúbrica extranjera. Sucederá pronto, e irán al volante de unos Seat León.

El modelo seleccionado por los Carabinieri y la Polizia se fabrica en la planta que Seat tiene en Martorell, y ha sido el más vendido en España durante los primeros seis meses del año. En la factoría tienen tarea para rato, pues ya han recibido un pedido de más de 925 coches con destino a las fuerzas de seguridad italianas. Los primeros 206 vehículos ya están construidos y partieron hacia Verona, donde muy pronto estarán patrullando sus calles.

La firma española ganó por la mínima el concurso de adjudicación. Su oferta solo era 83 euros -por automóvil- más barata para las arcas públicas del país transalpino que la propuesta por Alfa Romeo, que presentó a la puja su modelo Giulietta. Aunque, según explicaron desde Italia, no fue el precio el único elemento determinante. El coche español supera al italiano en potencia -lleva un motor de 150cv frente a los 120cv de su competidor- y además cuenta con otras prestaciones más satisfactorias para el desempeño del trabajo policial. Todo por un coste de algo menos de 44.000 euros por automóvil.

Pese a esta nueva adquisición, los Fiat que ahora mismo conducen los Carabinieri no desaparecerán de las carreteras italianas, ya que las autoridades han decidido no jubilar, al menos de momento, todo su parque actual de automóviles. Con los más de 900 coches encargados por las autoridades italianas, Seat se asegura unos ingresos de cerca de 40 millones de euros. Pero no queda ahí la cosa, porque la firma española podría abastecer a las fuerzas policiales de Italia con hasta 4000 coches. De ser así, la contraprestación se elevaría hasta superar los 175 millones de euros.

Aun así, el orgullo de la industria automovilista italiana puede encontrar consuelo en el hecho de que la Guardia Civil española cuenta en su parque automovilístico con los Alfa Romeo 159 aunque, a decir verdad, no son los que más abundan en los garajes del Instituto Armado. Las marcas francesas son las favoritas de la Benemérita, que cuenta entre sus efectivos de cuatro ruedas con los Citroën C4 Picasso -también del gusto de la Policía Nacional- y C5, los Renault Mégane y Laguna o el Peugeot 307. Incluso la marca alemana Opel ha encontrado su hueco en los cuarteles con su modelo Astra. Nadie es coche patrulla en su tierra.