Una década de despegue de la mujer en el running

«Este deporte ha sido un pilar fundamental para mí en los últimos meses»

La vida de Alba López Pons ha sido últimamente trepidante, como una carrera de cinco kilómetros. Esta pasión por trotar la descubrió de casualidad hace un par de años y se ha convertido en su salvavidas para lo que vino después. Lo de dejar atrás la profesión por la que luchó tanto e incluso se mudó a Madrid es lo de menos: «Soy periodista. No me sentía del todo bien y surgió la oportunidad de trabajar en la empresa familiar de frutas, en Villar del Arzobispo. Estoy satisfecha de esa decisión».

Precisamente su familia tembló desde los cimientos por la maldita palabra de las seis letras: a su madre le diagnosticaron cáncer en diciembre de 2022. Alba había fichado por el Serrano CA un mes antes. «Ganar Runcáncer Valencia en octubre de 2023 fue especial para mí porque ella falleció en agosto. Sé que estuvo conmigo toda la carrera, es la victoria a la que tengo más cariño y la que más me ha emocionado», explica la joven de 28 años.

«Para mí, correr en los últimos meses ha sido la vía de escape. Esa horita al día que tenía para evadirme, desconectar y soltarlo todo. Cansarme para poder descansar por las noches. Ha sido un pilar fundamental en el último año», asegura: «Si llega a ocurrirme esto cuando no corría, creo que no habría sido capaz de llevarlo de la manera en la que lo hice».

Y ese salvavidas lo encontró en el pueblo, en Huerta del Marquesado (Cuenca). Una prima que prepara la oposición de policía le propuso salir a trotar, por acompañarla: «Hicimos media horita, creo que a 5:45. Me sorprendió lo bien que me sentí».

Tanto que se apuntó a la nocturna de Riba-roja, donde quedó la 12: «Ahí la lié». Lo dice antes de explicar que empezó a preparar esa carrera a destajo, sin ningún control. Pasó de no hacer casi deporte –algunas tandas con la moto en circuitos– a correr a diario. Y su rodilla se quejó en forma de tendinitis.

Dio con Álex Zafri, quien le empezó a entrenar: «Me dio la base». Y con Ana Faus: «Como fisio es una crack». Afirma que gracias a ambos sigue corriendo. Luce los colores del Serrano CA y ahora la prepara José Garay. Y en esta aventura, ambos cortando cintas, tiene al lado a Joshua García, su pareja.

«He hecho deporte toda la vida y quiero seguir corriendo muchos años»

Teresa Moya forma parte de ese selecto grupo de incondicionales del running valenciano. De esas personas que se conocen casi cada carrera, de Valencia y del área metropolitana. Junto a su marido, Paco Clarós, raro es el fin de semana que no se pone el dorsal... bueno, él lleva un tiempo en capilla por motivos de salud. Pero sí, Teresa representa a esas mujeres que han visto crecer el fenómeno Valencia Ciudad del running y el despegue de la mujer en el mundo de la carrera a pie.

«Sí que es cierto que antes éramos pocas y había poca competencia», señala, para afirmar que ella nunca se ha sentido discriminada ni ha tenido ningún problema, ni dentro ni fuera de las carreras. «Todos los martes y los jueves quedamos a entrenar un grupo de amigas en l'Eliana. Yo trabajo en La Pobla de Vallbona, así que ese día me llevo la comida. Me paso muchas horas fuera de casa, pero hemos formado un buen grupito y lo pasamos genial», indica Teresa.

Ella ha hecho deporte toda la vida. «Jugaba a tenis y a raíz de conocer a Paco, que corría, por acompañarle empecé a introducirme en el running», señala Teresa, de 56 años. Tendría entonces unos 30, por lo que ya lleva cerca de tres décadas donde, sin darse cuenta, ha llegado a completar un maratón: «Yo apenas entrenaba, hacía aquagym y eso me servía para ir los fines de semana a las carreras. Empecé a salir a raíz de la pandemia, cuando cerraron la piscina».

Y entonces fue cuando empezó a quedar con sus amigas dos veces a la semana. «Yo nunca había hecho carreras de más de diez kilómetros. Lo del Maratón de Valencia fue por acompañar a un amigo. Acabé en 4 horas y 38 minutos, contenta, aunque creo que no haré más», desliza. Pero inmediatamente lo pone en duda. Si sale algún reto... De momento este año se ha preparado el Medio Maratón de Elche, que se celebra este domingo 10 de marzo.

Al ser el objetivo de este 2024 y estar separadas únicamente por una semana, esta vez ha preferido no correr el 10K Fem: «La he hecho otros años, es una carrera que está muy bien». A su ritmo, Teresa Moya se define como una persona que no es nada competitiva, sino que disfruta de la actividad física. «Yo he hecho deporte toda mi vida y lo que quiero es cuidarme, mantenerme bien y evitar las lesiones. Quiero seguir corriendo muchos años más», asegura.