Neuroma de Morton en corredores

Primeramente, cabe destacar que es una afección dolorosa que afecta al metatarso, más frecuentemente entre el tercer y cuarto dedo y se puede sentir como si tuvieran una piedra en el zapato. Esta enfermedad consiste en el engrosamiento del tejido alrededor de los nervios del pie, y esto puede causar un dolor y un ardor agudo en la bola del pie. Los zapatos de tacón alto y las deportivas muy apretadas pueden ser los principales causantes de la aparición del neuroma. Muchas personas empiezan a sentir alivio cuando empiezan a usar zapatos de tacón más bajo y con una puntera más amplia. «Esos dolores tras usar zapatillas comprimidas son de dolor persistente», declara el exdoctor del Valencia CF.

En general, no hay ningún signo externo de esta afección, como podría ser un bulto, pero pueden manifestar síntomas como si se tuviera un guijarro en el zapato, un dolor en la parte anterior del pie y un tipo de hormigueo en los dedos del pie. «Cuando salen los primeros síntomas, lo que hago es enviar los pacientes primero al podólogo. Si no consiguen recuperarse, ya se les da unos antiinflamatorios y corticoides. El último recurso es la intervención quirúrgica», afirma Candel.

Las personas que tienen juanetes, dedo de martillo, pie cavo o plano, presentan un mayor riesgo de desarrollar el neuroma de Morton. «Esto se desarrolla como un cayo», decía el doctor Buil. «Es como un globo de líquido». Durante el examen de tu diagnóstico, el médico que te atienda presionará tu pie para palpar el bulto y el punto de dolor. También puede haber una sensación de clic entre los huesos del pie. Aunque algunas pruebas por imagen son más eficaces para encontrar el neuroma.

Es probable que tu médico indique que te hagan unas radiografías del pie para descartar otras causas del dolor, como una posible fractura o sobrecarga. En las ecografías usan un tipo de ondas sonoras para generar imágenes en tiempo real de las estructuras internas. Esas son las medidas conservadoras de las que habla el doctor Buil, actual médico del Levante UD. «Primero se empieza con medidas conservadoras, el segundo paso son antiinflamatorios, el tercero es la infiltración y si no se corrige, hay que pasar por quirófano», concluyó. Estas son especialmente eficientes para revelar las anomalías en los tejidos blandos. El uso de ondas de radio y un campo magnético fuerte es efectivo para visualizar esos campos. Muchas veces indica la presencia del neuroma en personas que no tienen síntomas.

Para ayudar a aliviar el dolor que provoca el neuroma de Morton, se puede probar un masaje con hielo en la zona. Congelar un vaso de papel lleno de agua y hacerlo rodar sobre el lugar del dolor. Además, el descanso es clave para ello. Se deben reducir actividades como el trote, el ejercicio aeróbico o la danza, para que los pies no sufran mucho impacto.