¿Es la cerveza un buen reponedor?

Si no nos hidratamos lo suficiente tenemos muchas posibilidades de sufrir dolor de cabeza, fatiga, frecuencia cardíaca elevada, mareos y nauseas que nos arruine la carrera o lo que es peor, un golpe de calor.

No ingieras bebidas con alto contenido de alcohol, teína (té) y cafeína (solo con un consumo adecuado a tus necesidades) el día antes de un entrenamiento largo. Estas favorecen la deshidratación. En ambientes calurosos o muy húmedos, sécate el sudor frecuentemente con una toalla para facilitar el enfriamiento corporal.

La deshidratación puede ser causada por varios factores, entre ellos la intensidad del ejercicio o del entrenamiento, las condiciones ambientales, principalmente el calor, altitud, la humedad, y la cantidad de líquidos consumidos.

Los síntomas comunes de la deshidratación incluyen el aumento del ritmo cardíaco, el cansancio, los calambres musculares, los mareos e incluso el deterioro del funcionamiento del cerebro, como la disminución de la concentración, el estado de alerta y la falta de memoria a corto plazo.

Una de las bebidas considerada como la tercera de las más populares del mundo, por detrás del agua y el té, es la espumosa cerveza que sigue generando debate en cuanto a los efectos beneficiosos o nocivos que su consumo habitual que produce en los deportistas, y más específicamente en los corredores.

De manera que recuerda que la ingesta de grandes cantidades de alcohol aumenta la diuresis, retrasando así la recuperación del estado de hidratación óptimo, tras su daño muscular como bebida reponedora.

Una parte de los investigadores consideran que el consumo es contraproducente a largo plazo para el desempeño del atleta, afectando negativamente a su progreso físico.

Beber cerveza no tendría efectos positivos antes de la realización de ejercicio físico, puesto que su consumo afectaría negativamente al sistema nervioso y a la concentración. Adicional, y por sus efectos diuréticos, la cerveza favorecería la deshidratación y la posible pérdida de minerales esenciales para el correcto desempeño de las funciones musculares.

Por último, y sobre la conveniencia o no de beber cerveza de modo posterior al ejercicio, en cuanto a sus efectos recuperadores, los defensores de la cerveza afirman que ayuda a regenerar el metabolismo de los corredores principalmente por los antioxidantes que contiene, adicional a que es rica en nutrientes y tendría los mismos efectos hidratantes que el agua. Otros expertos en cambio señalan que la cerveza no puede considerarse como un sustitutivo de las bebidas deportivas, ya que no hidrata de manera óptima, ni repone en la cantidad necesaria los minerales ni la energía consumida durante el ejercicio.